El Teatro García Barbón se prepara para una velada de gala, y el motivo no podría ser más especial: ‘Síbaris’, la única obra teatral escrita por el vigués Domingo Villar, levanta el telón. Las luces se encienden para revelar una escenografía diseñada por Marta Villar, prima del propio Domingo, y detrás de esta producción, encontramos a Lois Blanco, el director maestro de esta puesta en escena única.
En esta entrevista exclusiva, nos adentramos en los entresijos de esta adaptación teatral que desafía todas las expectativas. La Compañía Condetrespés nos invita a un viaje lleno de sorpresas y emociones a través de ‘Síbaris’, editada por la Editorial Galaxia. Prepárate para sumergirte en el emocionante y apasionado mundo del teatro, donde la creatividad, la música y la experiencia en vivo se entrelazan en una ceremonia cautivadora que promete dejar una impresión duradera en todos los que se atrevan a adentrarse en el mundo de esta obra excepcional.
– Pregunta: El día 30 de este mes arrancáis en Vigo la gira de ‘Síbaris’, la única obra de teatro escrita por Domingo Villar ¿Cómo afrontas este reto? ¿Cómo se gestiona la presión de llevar a escena una obra de un escritor tan querido?
– Respuesta: Para nosotros ya había un vínculo anterior con Domingo Villar antes de enfrentarnos a la obra, por lo tanto, no siento esa distancia. Es cierto que no conocía a Domingo de manera personal, pero Carlos Blanco ya lo conocía al haber trabajado juntos en ‘A Praia dos Afogados’. Me acerco a su obra más desde el cariño y el respeto que desde una solemnidad mal entendida.
La relación entre ellos era de cercanía. Domingo y mi padre colaboraban con asiduidad. Como sabes Domingo era novelista no dramaturgo, que, aunque pueda parecer lo mismo son lenguajes diferentes. Juntos trabajaban y analizaban los posibles errores que aparecían en la escritura.
Cuando nos acercamos al Concello de Vigo nos dijeron que, y cito textualmente, «pedidnos de todos menos dinero», lo cual, sinceramente, nos ha dolido
Sobre lo de “un escritor tan querido” me gustaría hacer un comentario. Sé que será polémico, pero creo que el público debe ser consciente de las cosas que suceden y que callárselas no ayuda a nadie. Cuando nos acercamos al Concello de Vigo nos dijeron que, y cito textualmente, “pedidnos de todo menos dinero”, lo cual, sinceramente, nos ha dolido. Nos ha dolido porque siempre escuchamos eso del orgullo de Vigo pero no logramos entender como llevando por toda Galicia y fuera de ella (el año que viene estaremos en Madrid, en los Teatros del Canal), sin ayudas de Agadic, una obra de un vigués distinguido, estrenando en el García Barbón, sabedores de los cachés que se han pagado este verano en Castrelos, no se nos respalda económicamente porque el resto lo podemos y sabemos hacer nosotros.
Creo que se debe revisar en profundidad esa idea del orgullo de Vigo porque ¿hay algo que más orgullo pueda producir que presentar tu ciudad a un país desde la cultura?
–Domingo Villar fue conocido como autor de novela negra. ‘Síbaris’ es un cambio de registro total del autor, ¿Qué nos vamos a encontrar al acércanos al teatro a ver la obra? Como director, ¿cuál ha sido el mayor reto al que te has enfrentado en esta adaptación?
-‘Síbaris’ es una comedia de salón; una comedia burguesa a la antigua usanza y ese ha sido uno de los grandes retos a los que nos hemos, y digo hemos porque hemos trabajado como un equipo desde la dirección hasta el reparto, enfrentado.
‘Síbaris’ es un comedia de salón, una comedia burguesa a la antigua usanza y ese ha sido uno de los grandes retos a los que nos hemos enfrentado
Yo considero que los novelistas escriben bien, en el caso de Domingo lo hacía muy bien, pero que hay una falta de conocimiento de la arquitectura teatral. Ellos tienden a proyectar una idea, una imagen, pero desconocen la arquitectura teatral: los ritmos, los giros… ¡es lógico! Así que debemos convertirlo en algo más teatral. Como te digo, ha sido cuestión de naturalizar la obra, la ventaja en el caso de Domingo es que solo hemos tenido que ajustar la puesta en escena.
–La obra aborda temas como la crisis creativa y el miedo escénico. ¿Has experimentado personalmente alguno de estos desafíos en tu carrera como director teatral?
-Soy de los que piensan que todos los artistas hemos vivido crisis, de hecho, considero que sería raro no hacerlo. Quizás parezca raro pero las crisis son necesarias. Nos obligan a crecer como artistas.
Quizás parezca raro pero las crisis son necesarias, nos obligan a crecer como artistas
Evidentemente la que cuenta Domingo yo no he “tenido la suerte” de vivirla; es una crisis fruto del peso de la fama, de cuando te conviertes en un personaje y la gente espera de ti. Ese “me importa lo que se vaya a pensar de mí” incluso lo podemos encontrar en el propio texto.
–En ‘Síbaris’ diriges a Pablo Novoa, al que conoces de proyectos como Golpes Bajos o como director musical de la banda de Buenafuente ¿Qué importancia tiene la música en la obra?
-Sin duda la música tiene una importancia crucial en la obra, así que tener a Pablo es una maravilla, sin duda es una suerte. Recuerdo el primer día que llegó al ensayo y fue “guau”, lo habíamos encontrado.
Tener a Pablo Novoa es una maravilla, sin duda es una suerte
En la obra, no desvelo nada, hay un gato. Un gato perdido que nadie sabe de dónde viene ni donde está, Pablo es la voz de la conciencia de ese gato, sin duda, su música conecta cosas. Conecta esos momentos de comedia con los momentos más poéticos. Como te he comentado no es una comedia al uso, no vamos a ir al teatro y reírnos a carcajadas, pero sin duda tengo claro que lo pasaremos realmente bien y saldremos, nosotros y el público que se acerque, contentos de la función.
–Con 25 años, esta no es tu primera experiencia en la dirección. Ya has estado con una obra escrita y dirigida por ti, ‘Lady Shakespeare’, en el festival de teatro Fringe de Edimburgo y has dirigido diversos cortos ¿Con qué sueña, laboralmente, Lois Blanco?
-Sé que puede sonar tópico, pero sueño con poder vivir dignamente de dirigir. Solo el hecho de ensayar me resulta maravilloso. Estoy en un momento en el que considero que los diversos procesos del trabajo artístico son extraordinarios, además tengo la suerte de compartirlos con personas como Pablo u Oswaldo ¡es un increíble!
Sueño con poder vivir dignamente de dirigir, solo el hecho de ensayar me resulta maravilloso
Me gustaría aprovechar el momento para hacer una pequeña reflexión. Se genera un absurdo cuando tu sueño es dirigir con regularidad y mantener tu trabajo porque habla de la precariedad, si tienes que aspirar simplemente a vivir de manera estable es que algo pasa de base.
–Eres galegofalante, has dirigido escrito y dirigido ‘Lady Shakespeare’ en inglés; ahora, de nuevo cambias de idioma para pasarte al castellano ¿Qué diferencias notables encuentras entre dirigir una obra en inglés y una en español o en galego? ¿Cómo afecta esto a tu estilo de dirección?
-La obra en Galicia se presentará en gallego. En Madrid hemos pensado en representar en castellano, aunque, no te voy a engañar, ¿por qué no hacerlo en galego? Sería realmente interesante descubrir la respuesta del público.
Realmente el estilo de dirección no cambia en absoluto ya que la obra no cambia y la historia es universal más allá del lugar de representación, aunque sí, fonéticamente cambia. Ese cambio fonético puede convertir el texto en algo más agresivo por la sonoridad, pero la base es la misma.
–Finalmente, en una época en la que tenemos tanto entretenimiento al alcance de nuestra mano (incluso sin movernos de nuestro sofá), ¿por qué debemos ir al teatro a ver ‘Síbaris’?
-Aunque no lo creas esta es una pregunta a la que le hemos dado muchas vueltas, es casi filosofía. El teatro es una experiencia real compartida con otras personas, en tiempos de pantallas creo que compartir este tipo de experiencias nos hace mejores como comunidad. Compartimos espacios, risas y emociones y eso nos une como colectivo. Es cierto que el cine o la música nos llevan a las salas y allí compartimos experiencias, pero el teatro ¡ay, el teatro!