La Xunta de Galicia acaba de iniciar las obras del nuevo aparcamiento disuasorio que se construirá en Nigrán, en el entorno de la autopista AG-57 y su conexión con la carretera PO-324 (Gondomar-A Ramallosa). Se trata de una actuación de la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade que implicará una inversión cercana a los 650.000 euros.
La obra se ejecuta al amparo de los fondos europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia Next Generation UE. Busca impulsar la transformación de la movilidad en los entornos urbanos, apostando por desplazamientos más limpios y sostenibles.
La superficie total construida será de 3.500 metros cuadrados. Así, se crearán 72 plazas de aparcamiento con dos de ellas reservadas para personas con movilidad reducida. Igualmente, se contempla la preinstalación de tres puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Los trabajos, que tienen un plazo de ejecución de cinco meses, darán continuidad a la senda peatonal existente en la PO-340 y construirán zonas verdes con arbolado para sombra, además de una franja verde de 2,20 metros y un islote central ajardinado.
Asimismo, se repondrá la parada de autobús existente a la entrada del aparcamiento y se habilitarán cinco pasos de cebra para dar continuidad al tránsito peatonal. Adicionalmente, se instalará iluminación pública y vídeo vigilancia.
La delegada de la Xunta en Vigo, Ana Ortiz, que visitó la zona este lunes, explicó que se instalará una red de drenaje para la recogida de pluviales, la cual conectará a través de cuneta con el río Miñor.