El comité de empresa de Vitrasa, concesionaria del bus urbano de Vigo, ha pedido este miércoles la dimisión del alcalde, Abel Caballero, y del portavoz del gobierno local, Carlos López Font, por actuar “de la mano” de la empresa en el conflicto laboral que arrastran desde hace años y por no ser capaces de “solucionar” la situación, cuando se cumplen 25 días de huelga indefinida.
En una rueda de prensa, el órgano de representación de los trabajadores, formado por delegados de cuatro sindicatos, ha salido al paso de las declaraciones tanto del gobierno vigués como de la propia empresa, y han replicado que, realmente, “es el Ayuntamiento el que está politizando el conflicto”, usando los mismos argumentos que la propia Vitrasa (acusan a CIG y BNG de estar detrás de las protestas para dañar al servicio y a la ciudad) y todo para “esquivar sus obligaciones”.
Así lo ha trasladado el presidente comité, Imanol Arnoso (CIG), que ha subrayado que “no es serio” que un gobierno municipal haga esos planteamientos. “Si no son capaces de solucionar esto, que lo dejen, que se vayan”, ha incidido y, en la misma línea, ha vuelto a pedir a la empresa que, si es cierto que el servicio no es rentable y lleva años con pérdidas, “abandone” la concesión.
Arnoso ha subrayado que las negociaciones para el nuevo convenio siguen bloqueadas, porque la concesionaria insiste en vincular cualquier acuerdo al reequilibrio económico por parte del Ayuntamiento. En ese sentido, el comité ha denunciado que, aunque todavía no se sabe cuál será la compensación que pagará el Ayuntamiento, “la empresa ya está diciendo que será insuficiente”.
Tras volver a criticar que Vitrasa no ha hecho más que “devaluar” el servicio público de transporte urbano de Vigo, ha negado las afirmaciones de la dirección de la empresa sobre el apoyo a la huelga. Según ha recordado el presidente del comité, en una votación en la que participaron 244 trabajadores (de los 350 aproximadamente que tiene la plantilla), 214 votaron a favor de mantener las movilizaciones y, dentro de eso, “ganó la huelga indefinida”.
Finalmente, el comité se ha vuelto a desmarcar de los actos vandálicos que se han venido registrando en los últimos meses, con lanzamiento de objetos y daños en varios vehículos de la flota de Vitrasa. Con respecto al trabajador herido en las últimas horas, Imanol Arnoso ha matizado que fue trasladado a Urgencias “por precaución” pero que “ya está trabajando otra vez” y “no tiene nada”.
Nueva plataforma
Por otra parte, Imanol Arnoso ha informado de que los sindicatos han elaborado una nueva plataforma con sus demandas para la negociación del convenio, dado que la anterior data de 2020 y ha tenido que ser “actualizada”.
Así, el comité pide que se actualicen sus salarios, que llevan tres años congelados, y ha recordado que los trabajadores, que “ahora mismo están perdiendo un 16,5% de poder adquisitivo”, también necesitan “un reequilibrio económico”. A ello se suman otras mejoras en las condiciones de trabajo, como la regulación de los descansos o la adecuación de las rutas y horarios “a la realidad de la ciudad”.
Trabajadores “abandonados”
El vicepresidente del comité, Noli Núñez (CC.OO.), ha incidido en que la huelga indefinida es incluso “rentable” para la empresa, que tiene la mitad de gastos, al tener en activo menos buses y la mitad de la plantilla parada, pero con todos los autocares llenos.
“Nosotros somos los sufridores del conflicto. Nosotros somos los que estamos todos los días a las 05.00 horas en las instalaciones para controlar los buses que salen. Estamos deseando llegar a un acuerdo, por nosotros y por nuestras familias, esto no es cachondeo, es algo muy serio”, ha subrayado, y ha tildado de “vergonzoso” que, en este conflicto, el gobierno local “vaya de la mano” de la empresa y deje “abandonados” a los trabajadores.
En la misma línea, Rosa Pampillón (UGT) también ha subrayado que “es sorprendente que el alcalde mire para otro lado” cuando la empresa concesionaria “basa su gestión en los incumplimientos”. Así, además de los numerosos requerimientos en la Inspección de Trabajo, ha puesto como ejemplo el Plan de Igualdad de Vitrasa, que “está caducado” y, pese ello, el Ayuntamiento prorrogó en 2020 por 5 años más la concesión.