Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), el quinto plenilunio del año tuvo lugar este 23 de mayo en la constelación de Sagitario a las 15:53 horas. Sin embargo, no fue hasta la noche y pasada la madrugada cuando se pudo observar en todo su esplendor.
Y es que la luna llena de mayo, más conocida también como Luna de las flores, es una de las más espectaculares del calendario lunar. Es más, su nombre lo recibe porque se da en la fase lunar en la que se celebra que las flores de primavera están en su máximo esplendor ya que se trata de un mes en el que está a punto de acabar la estación para dar paso a los meses de verano, cuando se espera otra de las lunas llenas más significativas. Será el próximo 22 de junio, dos días después de la entrada plena y oficial de la temporada estival.
Con todo, la Luna llena de las flores, y según la revista científica estadounidense Farmer’s Almanac, es un término que le atribuyeron las tribus nativas americanas, popularizándose la denominación con el paso de los años. En particular, y según la tradición popular, esta luna lena de mayo les ayudaba a marcar el cambio de estaciones y el inicio de nuevas etapas vitales.
Sin embargo, esta Luna llena de mayo responde también a otros nombres según la zona del planeta. En el hemisferio norte se conoce como Luna de las flores por su vinculación con la explosión de la primavera pero en el hemisferio sur responde a los términos de «Luna del castor» o «Luna de la escarcha».
Y si nos vamos a otras cultura, denominaciones como «Luna llena de maíz» o «Luna de la leche» son otras por las que se popularizó. En China, además, se la conoce como «Luna de dragón».
En junio llegará la “Luna de fresa”
La próxima luna llena, el 22 de junio, será la «Luna de fresa». Según apuntan desde Meteored, la fase lunar comenzará a las 03:08 de la madrugada (hora española). Y como bien explican, este peculiar nombre de la luna no tiene relación alguna con su color sino que también proviene del nombre que le dieron los nativos americanos y las tribus de indígenas del este de Norteamérica. Y es que en esta época es cuando se recogían las fresas en esta zona.
Además, en Europa también se la conoce como «Luna Rosada» puesto que a veces tiene un ligero tono rosado al estar situada más baja y que en la ciudad ya se ha podido observar en toda su plenitud en años anteriores.