Cosas que debes evitar hacer con tu patinete eléctrico
Invertir en un patinete eléctrico es una operación muy asequible que resuelve grandes problemas de movilidad. Estos aparatos son capaces de alcanzar los 25 kilómetros por hora para que realicemos desplazamientos con total comodidad. Nada de atascos, gastos en gasolina o agotamiento por ir caminando. Sin embargo, no todo vale.
La responsabilidad en la carretera, bien se esté tras un volante o tras un manillar, es crucial para el bienestar colectivo. Por consiguiente, te animamos a que evites cualquier tipo de comportamiento que te pueda poner en peligro, así como aquellos que ocasionen daños en terceros. Sigue nuestras recomendaciones y cada recorrido se solventará sin problemas de por medio.
No usar casco
Prescindir del casco cuando se lleva un patinete eléctrico, a pesar de no estar tan mal visto como hacerlo al ir en una moto, se presenta como una auténtica temeridad. El riesgo de sufrir una caída está siempre sobre la mesa y depende de ti anticiparte a las lesiones más graves.
El cráneo es extremadamente sensible a los golpes fuertes y, dada la velocidad que alcanzan estos dispositivos, carece de sentido asumir este riesgo. Así que, además de comprar un patinete de última generación, incluye en la cesta de la compra un casco de buena calidad. ¡Podría salvarte la vida!
Exceder velocidad recomendada
Si hablamos de velocidad entonces es importante explicar cuáles son los límites actuales. La DGT ha sido clara y ha establecido un máximo de 25 kilómetros por hora para esos vehículos eléctricos; los cuales se engloban dentro de la categoría de VMP.
Además de ponerte en riesgo, si superas esta velocidad podrías sufrir una sanción de 500 €. De hecho, las autoridades están autorizadas para retirar el vehículo. En consecuencia, por mucho que seas un amante de la adrenalina, el uso de los patinetes no es el momento óptimo para gozar de ella.
Sobrecargar la batería
¿Eres de los que dejan el móvil enchufado toda la noche? Bien, pues con los patinetes eléctricos descarta esta idea. Si lo haces, la batería se sobrecarga y aumentan las probabilidades de incendio. Algo que te pone en peligro incluso en tu propio domicilio.
Más allá de este gran riesgo para tu integridad física y económica, conviene señalar que sobrecargar la batería provoca un desgaste considerable en ella. Dicho de otro modo: se acorta su vida útil y tendrás que cambiarla antes de lo previsto.
Ignorar problemas mecánicos
Los patinetes eléctricos no dejan de ser vehículos y, como tal, cuentan con diferentes componentes mecánicos que deben revisarse periódicamente. Quizás no haya que invertir tanto en su reparación como en un coche; sin embargo, el mantenimiento preventivo se antoja igual de importante.
A nadie le gusta gastar dinero en esta materia. Pero no hacerlo podría suponer que el problema se agrave y, finalmente, el gasto sea mayor a lo esperado. Todo ello sin dejar de lado lo peligroso que es circular con un patinete que se puede estropear en cualquier momento.
Trucar el patinete
Ignorar las recomendaciones sobre la velocidad no es fácil: los patinetes eléctricos tienen sus propios límites de fábrica. No obstante, hay quienes han encontrado el modo de superarlos, trucando el dispositivo para así aumentar los kilómetros hora que son capaces de alcanzar.
No lo hagas: ya sabes que la multa asciende a los 500 €. Asimismo, cualquier modificación que se haga sobre el vehículo implica perder la garantía y las probabilidades de que sufra fallos mecánicos aumentan. ¡No merece la pena!