La «luna de fresa» brilla estos días más que nunca en Vigo. La llegada del verano entró en la ciudad con un espectáculo que no es fácil observar. Su salida por el este, sobre los montes de la urbe, se convirtió en un grandioso y colorista momento. Un rayo verde destacó cuando «Catalina» asomó.
Su grandeza es tan llamativa que fue suficiente con elevar la vista a medianoche. La Luna llena de junio o más conocida como «luna de fresa» tuvo lugar, en su máximo apogeo, este sábado día 22 de junio a las 03:08 horas.
Fue una fabulosa y esplendorosa imagen que marca el inicio del verano. Esta «Luna de fresa» es una de las más esperadas del año por su vistosidad e historia además de ser la primera del periodo estival. Y es que adquiere este popular nombre por una tradición de los nativos americanos, ya que la fecha de la Luna llena de junio coincidía con la recolecta de la fresa.
Así, esta Luna llena es una «oportunidad especial» para los observadores del cielo ya que su posición más baja en el cielo puede crear vistas impresionantes y fotogénicas, especialmente cuando está cerca del horizonte.
93 días de verano
Esta Luna llena coincide con el inicio oficial del verano que, como señalan desde el Observatorio Astronómico Nacional, dependiente del Instituto Geográfico Nacional y del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, durará aproximadamente 93 días y 16 horas, terminando así el próximo 22 de septiembre con el comienzo del otoño.
El inicio del verano en el hemisferio norte está definido por el instante en que la Tierra pasa por el punto de su órbita desde el cual el Sol presenta su máxima declinación norte.
El día en que esto sucede, el Sol alcanza su mayor elevación sobre el horizonte al mediodía y describe en el cielo el arco más largo. Como resultado, ese es el día con más horas de Sol del año.
Además, durante varios días la altura máxima del Sol al mediodía parece no cambiar, y debido a ello, al comienzo del verano también se le llama solsticio de verano (del latín solstitium, Sol quieto).