El fenómeno histórico que estamos viviendo estos días del mes de septiembre con las mareas vivas más altas que se han registrado en los últimos 19 años ha dejado imágenes sorprendentes en Vigo y toda su área.
Cotas extraordinarias que marcan mareas de récord y que tuvieron su punto álgido esta tarde, concretamente a las 17:36 horas, cuando la pleamar alcanzaba una subida de 4,2 metros, mayor incluso que la que se vivió en la jornada del miércoles.
Y tuvo un gran efecto en las instalaciones portuarias viguesas. Tanto en el puerto pesquero del Berbés como en la terminal de Trasatlánticos o en la escollera del Náutico, el mar se ‘comió’ literalmente gran parte de los muros del Puerto, dejando imágenes en la retina de los vigueses que tardarán muchos años en volver a verse.
Imágenes que se repitieron, también, por toda la geografía del área viguesa y gallega donde, por ejemplo, afectó al puente romano de A Ramallosa, en Nigrán, o en aquellos puntos más abruptos del territorio como en la costa norte, especialmente en Estaca de Bares.
Incluso, la salida del MSC Virtuosa –atracado en el puerto desde las 10:00 horas y que invadió el centro de la ciudad de turistas- fue todo un espectáculo digno de contemplar por lo esplendoroso y grandioso que se veía.
Pero este fenómeno singular tendrá otra nueva ocasión para disfrutarlo a la hora de la la bajamar que se espera para el día de hoy. Y es que a las 23:47 horas llegará a registros muy bajos -como sucedió en la jornada de ayer- alcanzando los 0,2 metros.
Como confirmaba José González, responsable de la unidad de Oceanografía del Centro de Investigación Mariña (Ecimat) de la Universidade de Vigo, a VIGOÉ, el momento de mayor intensidad era este miércoles por la luna llena, pero el fenómeno se notaría plenamente en la jornada del jueves por el «pequeño retraso» que lleva la marea «con respecto a la atracción gravitatoria». De ahí que «haya casi un día de retardo y no sea un efecto totalmente inmediato», aclaró.
Y para la jornada del viernes se esperan valores similares, ya que las predicciones de Meteogalicia marcan dos pleamares de 3,9 metros (5:59 horas) y 4,1 metros (a las 18:20 horas). Mientras, habrá una única bajamar a las 12:03 horas que alcanzará una cota de 0,3 metros.
Un ‘combo’ perfecto: luna llena, más cerca de la Tierra y equinoccio
La combinación de la luna llena, su posición en el perigeo -más cerca de la Tierra- y el equinoccio de otoño suponen un ‘combo’ astronómico perfecto para que este singular fenómeno de las mareas vivas tenga lugar durante este mes de septiembre.
Como explica Gabriel Rosón Porto, oceanógrafo físico da Universidade de Vigo, en declaraciones a Europa Press, la colocación del sol y la luna con respecto a la tierra, y a su vez entre ellos, lleva al punto culmen a este fenómeno en Vigo pero también en toda Galicia e, incluso, llegando a la cornisa cantábrica.
El primer elemento que se da es que el sol está «prácticamente sobre el ecuador», esto es, casi en el equinoccio de otoño, que será el día 22. Esta posición, llamada «declinación cero», aumenta la influencia que el sol tiene en las mareas –aproximadamente un tercio, mientras que dos tercios se corresponden con la influencia de la luna–.
Además, esta semana, la luna, el sol y la tierra están «en oposición», esto es, con la luna a un extremo de la tierra y el sol al otro. Este punto, que sucede cada 15 días, determina la aparición de mareas vivas, más intensas.
Además, Gabriel Rosón recuerda que la luna «está también en el ecuador» de la tierra y se ubica en el «perigeo», es decir, en su punto más cercano al planeta, ya que su órbita no es circular, sino elíptica. Estos dos últimos elementos ocurren cada, más o menos, 28 días, pero con periodicidades distintas, por lo que no van acompasados.
Como consecuencia, estos cuatro elementos se alinean, dicen las estadísticas, cada 18,6 años, momento en el que se producen mareas vivas más intensas, que pueden llegar a superar en medio metro a los picos habituales.