El pleno del Ayuntamiento de Mondariz ha confirmado este jueves la dimisión del gobierno local, integrado por cinco concejales de Alternativa por Mondariz (AxM) y presidido por Xoán Carlos Montes, Calis, después de que la semana pasada presentasen su renuncia, denunciando el «bloqueo» por parte de la oposición.
Así, en la tarde de este jueves se ha llevado a cabo el pleno necesario para ratificar esta dimisión, a la espera de convocar un nuevo encuentro de la corporación local para nombrar otro regidor.
Según el propio Montes, su partido rechazó la proposición ‘in extremis’ presentada este pasado miércoles por el BNG, que ofrecía a AxM continuar en el poder, a cambio de salir del gobierno el actual alcalde (y también abandonaría su cargo el cabeza de lista del Bloque, el nacionalista Emilio Barros).
Finalmente, desde AxM decidieron continuar con su decisión y dimitir conjuntamente. Ahora, será precisamente el exalcalde el que tendrá que encargarse de convocar un nuevo pleno, por ser el concejal de mayor edad y que más años lleva de edil.
El equipo de ‘Calis’, con un gobierno en minoría, lleva días advirtiendo de que ese «bloqueo absoluto» de PP (3 concejales), BNG (2 concejales) y PSdeG (una representante) ponía en riesgo la estabilidad del municipio, y ante la falta de acuerdo para aprobar los presupuestos municipales, el regidor apeló al «sentido de la responsabilidad» del resto de grupos.
Alternativa por Mondariz pidió a nacionalistas, ‘populares’ y a la concejal socialista abrir una vía de negociación para aprobar las cuentas y dar luz verde a un plan de pago de la deuda a 14 años. No poder contar con presupuestos, advertía, provocaría la intervención del Ayuntamiento por parte del Estado y la obligación de devolver la deuda en 5 años, «lo que supondrá la asfixia total» de Mondariz.
Por ello, el gobierno local ofreció a la oposición renunciar a la segunda dedicación propuesta en los presupuestos y repartir la del alcalde entre cuatro, con tres tenencias de alcaldía. En una carta enviada a los grupos.
Ante la falta de contestación, el gobierno de Mondariz decidió renuncia, aunque manteniendo las actas de concejales.