El Puerto de Vigo dio la bienvenida este martes a más de 7.000 personas que llegaron a la ciudad a bordo del megacrucero ‘Arvia’, en escala inaugural.
El buque, perteneciente a la flota de la compañía británica P&O, hizo su entrada en la ría de Vigo sobre las 07:45 horas procedente de Le Havre. Y está previsto que abandone el muelle de trasatlánticos sobre las 18:30 horas para poner rumbo a Lisboa.
A bordo viajan un total de 5.625 pasajeros, en su mayoría británicos, y 1.674 tripulantes.
Al igual que su gemelo, el “Iona”, este crucero de 344 metros de eslora -lo que lo convierte en uno de los más grandes del mundo- está propulsado por gas natural, siguiendo así la línea de modernización que están llevando a cabo las navieras para reducir las emisiones y la huella de carbono.
Lo cierto es que el megacrucero ya había navegado por aguas de la ría viguesa el pasado mes de mayo -cuando tuvo que fondear a la altura de Cangas para desembarcar a una pasajera enferma- pero este martes es la primera vez que recala en la Estación Marítimo en su estreno oficial.
Botado en 2022, cuenta con 20 cubiertas y 2.614 camarotes. Tiene, además, 6 piscinas, un minigolf y un parque acuático, además de ‘scape room’ que simula un submarino.
Visita a la tripulación
Así, el presidente del Puerto, Carlos Botana, visitó esta mañana el buque para participar en la tradicional bienvenida al capitán y su tripulación, destacando del mismo el hecho de ser «uno de los barcos de crucero más grandes del mundo y, por tanto, uno de los que más pasajeros transporta».
Durante su estancia a bordo, Botana estuvo acompañado por el jefe de división de Gestión Comercial de la APV, David Castro; el oficial de protección, Daniel López; el agente consignatario de Pérez & Cía, Iñaki Sánchez; y la responsable de la Vigo Cruise Terminal, Sabela Vázquez.
En la recepción ofrecida por el capitán, Paul Brown recordó que lleva visitando el Puerto de Vigo desde hace 35 años a bordo de diferentes navíos, desde la época del Camberra y, en este contexto, aprovechó para felicitar tanto a la Autoridad Portuaria así como al consignatario por la «calidad de su servicio», al tiempo que puso en valor el «excelente trabajo» llevado a cabo por el fallecido Alberto Durán, que da nombre a la Estación Marítima, en favor del tráfico de cruceros en la terminal viguesa.