«Queréis dejar los putos móviles». Robe Iniesta no engaña a nadie. Es lo que es. Un músico único con una trayectoria marcada de forma indeleble por Extremoduro. Pero en su nueva versión «en solitario» tampoco se calla. Dice lo que piensa. Y los miles de espectadores que acudieron en Vigo a su último concierto escucharon de esa boca lo que otros artistas no se atreven a pronunciar.
La gira «Ni santos ni inocentes» llegó con todo el rock que es capaz de desplegar el de Plasencia. A sus 62 años Robe saltó al recinto del Instituto Ferial de Vigo (Ifevi) dispuesto a ser escuchado. Y para eso no quiere ningún otro canal que los ojos y los oídos. En un momento de su concierto, cuando los teléfonos se encendieron por cientos para grabarlo, no se mordió la lengua.
Robe y sus fieles seguidores
Fue un repertorio en el que no faltaron tampoco sus clásicos. Los fieles seguidores de Robe entonaron sus letras más conocidas. También descubrieron sus temas nuevos, los violines sobre el escenario y la fuerza de su cuarto disco en solitario, “Se nos lleva el aire”.
Ni siquiera el deficiente sonido del Ifevi pudo estropear la fiesta. Fue la última antes de que concluya la gira, que cerrará en el WiZink Center de Madrid el 15 y 16 de noviembre con el cartel de no hay entradas.
PD: bravo por los incondicionales que también volvieron a sufrir la pesadilla de llegar al Ifevi por la autopista. ¿Alguien hará algo algún día para solucionarlo?