En los años sesenta y setenta del pasado siglo XX, en la ciudad de Vigo existían numerosos mesones y cafeterías, e incluso cervecerías muy concurridas, cuya enumeración sería casi interminable. La mayoría cerraron sus puertas hace años, sin embargo, muchas personas todavía recuerdan, por ejemplo, la cervecería Joaquín, en la Rúa Areal, que fue punto de encuentro para distintas generaciones durante décadas. También el Josfrancs, el Rosalía, el Mimosa, el Miami, la inolvidable cafetería Príncipe, la cafetería del hotel Bahía, el Gong, el Alameda, el Rococó, Tamanaco, Nuevo Derby, Flamingo —-con sus actuaciones en directo—-, sin olvidar el Mesón Barcelona, el Orense, los mesones de Matamá —-aún existentes—-, el Mesón San Amaro, la Viuda, el Cerdo, y muchos otros. Precisamente, en la Rúa María Berdiales, de Vigo, todavía existe este local, ya cerrado desde hace años y que pasa inadvertido, donde existía el afamado mesón: “Mesón del Duero”. Pero entre todos ellos destacaban, en un lugar prominente, el Eligio —-aún existente—-, y la cafetería Goya, ya desaparecida, donde se daban cita los personajes más destacados de la cultura.