La empresa Ximénez está obligada por contrato a reparar o reemplazar las figuras que ardieron en la calle Elduayen este martes, dos photocall con forma de paquete de regalo y la figura de un oso que desde el pasado mes de noviembre han protagonizado las fotografías de los miles de visitantes que han disfrutado de la Navidad de Vigo.
Ahora, a falta de cinco días para el apagado de las luces, este domingo, la adjudicataria debe retirar las figuras e instalar otras en su lugar para cumplir con las condiciones del millonario contrato, que asciende a 9,4 millones de euros por las luces de las fiestas navideñas de 2023, 2024, 2025 y 2026.
Este miércoles, a primera hora de la tarde, operarios de la adjudicataria de las luces de Navidad, Ximénez, retiraban uno de los dos elementos decorativos que ardieron en la jornada del martes por causas que se desconocen. Las primeras hipótesis apuntaban a un cortocircuito, pero algunos vecinos aseguraban a Vigoé que las figuras sufrieron un ataque vandálico. También los operarios apuntaban este miércoles, probablemente sin pretenderlo, hacia esa dirección, al indicar que «los quemaron» y no que «se quemaron».
«Evidentemente han sido quemados porque uno de ellos ardió en la zona donde no está el cableado«, aseguraba un vecino de la zona mientras que otro informaba que se había puesto en contacto con la Policía Local, este miércoles por la mañana, para exigir la inmediata retirada de las figuras dañadas por el peligro que suponían para los ciudadanos.
«Pese a estar encintado, el aire hace que se desprenda pudiendo caer y golpear a algún ciudadano o, una vez en el suelo, puede impedir el paso a vehículos de reparto o a los propios de emergencias», indicó este vecino en su escrito a la Policía Local, en el que adjuntó una imagen del elemento, visiblemente deteriorado tras el incendio y con un fragmento a punto de desprenderse.
A pesar de que el Concello apuntó a que los objetos serían inmediatamente reemplazados, no ha sido hasta la jornada de hoy cuando una grúa se ha llevado el primero de ellos, una figura de oso con uno de los laterales prácticamente calcinado y que en las últimas horas había estado precintado con una cinta de la Policía Local.
En su lugar, horas más tarde, en pleno temporal de lluvia y viento, la empresa instaló un árbol de Navidad, mientras que la otra figura, la caja de regalo, continuaba esta noche en el mismo lugar, iluminada en una parte y a oscuras en la zona que se vio afectada por el fuego.
El pliego de condiciones es muy claro al respecto y obliga a la empresa adjudicataria, Ximénez, «a reparar o sustituir de inmediato los elementos dañados para reponer el servicio» durante la duración del contrato, del 1 de julio de 2023 hasta el final de las fiestas navideñas del periodo 2026-2027, por 9.440.147,87 euros.
Sin embargo, la fecha del apagado es inminente –este mismo domingo– por lo que los propios operarios admitían sobre el terreno que aunque la intención es esa, difícilmente se llegará a tiempo para reemplazar las figuras dañadas por unas idénticas y con toda probabilidad optarán –para cumplir con sus obligaciones contractuales– por unas similares hasta este domingo. La reparación de los daños en las estructuras también se aventura muy compleja dado que el taller de la empresa no se encuentra en Vigo y tampoco los posibles recambios de las piezas incendiadas.
Condiciones del millonario contrato
«La empresa contratista será la responsable en todo momento de mantener en perfecto estado de conservación aquellos elementos autorizados a permanecer instalados en la vía pública», precisa el pliego, que también deja en manos de la adjudicataria la reclamación de daños a terceros por daños producidos sobre las instalaciones. Independientemente de las posibles indemnizaciones posteriores, es la empresa, añade, la que debe asumir los costes de reparación o sustitución de los elementos ornamentales dañados, provocados por terceros o por causas de fuerza mayor, incluyendo por tanto el vandalismo y también los fenómenos meteorológicos.
También especifica que a la finalización de cada campaña, y en el plazo máximo de veinte días desde el acto de apagado, la empresa debe presentar un documento relacionando la totalidad de las incidencias y averías surgidas durante el periodo de vigencia, detallando las causas que motivaron tales averías y tiempos de intervención, reparación o sustitución según cada caso. En el caso de las averías más recurrentes, además, se debe presentar un informe que recoja los tiempos medios de cada intervención desde la denuncia de cada incidencia hasta el restablecimiento total de la misma.