La alerta naranja por fenómenos costeros de este lunes ha vuelto a dejar en las calles de A Guarda una imagen para el recuerdo provocada por el temporal de mar y viento.
Un particular espectáculo con una vistosa e impresionante marea de espuma que ya es un clásico en el municipio costero y que se repite en el puerto guardés cada vez que se registra un episodio de fuerte oleaje.
Esta vez fue en la playa de Carreiro, en pleno casco urbano y al lado de la zona portuaria y la lonja, donde se pudo ver el enorme manto de espuma a lo largo y ancho de la costa que tiñó de blanco la zona y que llegó, incluso, a sobrepasar la acera y la calzada.
Con todo, y lejos de la equivocada idea de que se trata de contaminación, esta espuma marina se crea por la batida del mar sobre las rocas. Se da especialmente cuando contiene altas concentraciones de materia orgánica disuelta, tales como floraciones de algas y yodo.