Las investigaciones realizadas por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra se iniciaron a raíz de una denuncia interpuesta en la Fiscalía de Menores de la provincia de la que se desprende la existencia de archivos fotográficos y videográficos en el terminal móvil de una menor de 14 años.
Las pesquisas llevadas a cabo por Equipo de Investigación Tecnológica de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Pontevedra fueron determinantes para constatar la existencia de conversaciones de varias personas con la menor a través de Whatsapp, de las que se extraen propuestas, en muchos ocasiones bajo amenazas y coacciones, para que procediera al envío de fotografías y videos propias de contenido erótico o sexual, al mismo tiempo que le solicitaban tener un encuentro real con el fin de mantener relaciones sexuales explícitas.
Según se desprende de la investigación, existiría un grupo de Whatsapp en el que los usuarios intercambiaban teléfonos de menores de edad, que en algún momento enviasen contenido de este tipo de archivos, o que fuesen proclives a realizar esta actividad por sus condiciones especiales, sociales, familiares o de otra índole.
Durante la fase de explotación de la denominada operación ‘Néboa’, que se desarrolló en varias provincias del territorio nacional, se procedió a la detención de siete personas en: Cáceres, Córdoba, Alicante, Valencia, Málaga, Palma de Mallorca y Cádiz y a la investigación de otras cuatro en las provincias de Pontevedra, Alicante y Málaga.
Se realizaron un total de ocho entradas y registros que se llevaron a cabo en cada uno de los domicilios de las personas detenidas e investigadas, contando para ello con el apoyo y colaboración de las Unidades Orgánicas de Policía Judicial de la Guardia Civil de las respectivas provincias. Se intervinieron 22 teléfonos móviles, 6 ordenadores, 21 pendrives, 4 discos duros, 2 tabletas, 2 tarjetas de memoria y diversos soportes ópticos (CD y DVD).
La investigación continúa abierta con la intención de analizar el material intervenido con el objeto de determinar la posible existencia de contenido de pornografía infantil, producción de material pedófilo (abusos sexuales a menores de edad) y determinar la identidad de otras víctimas y posibles conexiones con otros usuarios.