Lograr la intervención de los medios marítimos del Gobierno central ante la llegada de la «marea plástica» a las playas gallegas. Es el objetivo y la petición que realiza Adega, la Asociación para la Defensa Ecológica de Galicia, a la Xunta de Galicia.
Para ello, urge al Gobierno autonómico a elevar el nivel de emergencia a situación 2 –actualmente en nivel 1, correspondiente a episodio de pequeña gravedad– del plan anticontaminación Camgal, con el que se podría llevar a cabo una «intervención de los medios marítimos del Estado». Se trata de un paso necesario para que el Ejecutivo central pueda intervenir y prestar su ayuda.
Apunta que, de este modo, el Gobierno central podría aportar buques y barreras anticontaminación con el fin de contener la extensión del vertido de ‘pellets’ antes de que lleguen más restos a las costas y a las playas gallegas.
«Dada la naturaleza de estos materiales y su flotabilidad, resultaría más efectivo controlar su dispersión en el propio mar antes de que arriben a la costa y se depositen en los arenales y en los bancos marisqueros», razona. «De especial importancia sería reforzar la protección en la boca de las rías y en el entorno de los espacios naturales protegidos, áreas en las que la penetración de estos contaminantes y su persistencia en medio podría suponer un mayor daño ecológico», añade Adega.
Igualmente, la entidad ecologista ha solicitado una entrevista con los responsables de las consellerías de Medio Ambiente y Mar para conocer las actuaciones llevadas a cabo por la Xunta, a la que demanda mayor transparencia en la información y en las consecuencias del plástico llegado a las costas.
Adega organiza diversas jornadas formativas con el voluntariado para coordinar las labores de limpieza y su intervención directa en el litoral afectado. Cree fundamental establecer un protocolo de actuación y una mínima coordinación en las labores de limpieza para no causar mayores daños a los ecosistemas del litoral. «La experiencia acumulada durante la catástrofe del Prestige y las anuales limpiezas simultáneas de playas debe resultar en unos trabajos de voluntariados más efectivos y seguros».
«Son la Xunta, el Estado y, en última instancia, los municipios los encargados de disponer los medios precisos para hacer frente a esta emergencia ambiental», opina Adega. «Les exigimos, por tanto, mayor implicación, medios, coordinación y transparencia para que, otra vez, no sea la ciudadanía la que tenga que afrontar en solitario la lucha contra esta nueva catástrofe», expone.
Los ayuntamientos organizan jornadas de limpieza y vigilancia
En la misma línea que los ecologistas se ha expresado hoy también la Fegamp, la Federación Gallega de Municipios y Provincias, que reclama más medios y mayor información sobre la situación actual a la Xunta de Galicia.
Su presidente, el alcalde de Vilagarcía de Arousa, Alberto Varela, señala que tienen constancia de ‘pellets’ desde el sur de la provincia pontevedresa, pasando por la Costa da Morte hasta la Mariña lucense, por lo que solicitó más información sobre la composición del material y un protocolo claro de actuación que no recaiga solo en los municipios, ya que se teme que «pueda tener efectos negativos en los recursos marinos y en el medio ambiente».
«La Xunta ha vuelto a abandonar a los municipios en una catástrofe medioambiental diciéndonos en una carta que la limpieza de las playas es competencia municipal y lavándose las manos en una situación que no sabemos qué repercusión puede tener en el medio, en los recursos marinos de los que tanta gente vive y en el mismo Parque Nacional das Illas Atlánticas, el único que existe en Galicia», censura.
En Nigrán, Vigo y Redondela
El Concello de Nigrán es uno de los municipios del área en donde se han detectados los ‘pellets’. El Ayuntamiento organiza para mañana martes, 9 de enero, a las 10,00 horas, una primera limpieza en los arenales de Patos, Prado, Cansadoura y Madorra. Estará coordinada por la Asociación de Escolas de Surf de Patos, Club Marítimo de Panxón y operarios municipales de limpieza.
Por su parte, el Concello de Vigo señala que, hasta el momento, no ha detectado bolas de «pellets» en las playas de la ciudad, pese a que se han realizado varias inspecciones. Aun así, ha explicado que seguirá llevando a cabo controles y ha pedido a los vigueses que si encuentran este tipo de residuos se pongan en contacto con el 010 o con la Policía Local.
Incluso, está tratando de localizar grandes tamizadoras que permitan eliminar de forma eficiente este tipo de residuos, indicando también que los ciudadanos que recojan este material lo hagan con guantes y lo depositen en el contenedor verde.
También el Concello de Redondela se encuentra «vigilante» pese a que todavía no se han detectado estos microplásticos en las playas del municipio.
BNG y PSOE critican la actuación de la Xunta y Sumar estudia una denuncia por «inacción»
En plena campaña para las elecciones autonómicas del 18F, la llegada de «pellets» a las costas gallegas se ha convertido en el principal tema de enfrentamiento político entre los partidos que concurren a los comicios, comparando la situación con la catástrofe del Prestige del año 2002. Incluso, Sumar ha ido más allá y ha anunciado que estudia denunciar a la Xunta de Galicia por «inacción».
El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, acusó al PP de gestionar esta crisis medioambiental igual que lo hizo con el petrolero Prestige. Además urge a la Xunta a elevar el grado de emergencia para que el Gobierno central pueda intervenir.
Así, ha criticado que el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, no haya elevado el nivel de alarma. «El Gobierno Central no pueda actuar si Rueda no actúa», ha advertido, subrayando que desean ayudar al gobierno gallego y no hacer política con este asunto «como parece que quiere hacer él echando las culpas a otras», ha recriminado.
Por su parte, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ha seguido la misma línea y ha recriminado al PP que «ante la marea de «pellets» que inunda la costa gallega, en lugar de ofrecer soluciones, esté repitiendo la marea de mentiras, manipulación e incompetencia» que ya utilizó en la catástrofe del ‘Prestige’.
Así, ha recriminado que vuelva a utilizar el «mismo modus operandi» que con el Prestige. «Primero ocultando la marea de plástico y sin actuar ni poner medios» y, ahora, «intentando manipular la situación a través de los medios públicos».
Además, ha reprochado tanto a la Xunta como al Gobierno central que permanezcan instalados «en su habitual pim-pam-pum, absolutamente inútil para los gallegos» y les reclama «que se pongan a trabajar para que haya los medios y los recursos necesarios para solucionar este problema».
Por último, desde las filas de Sumar, que se presentan a las elecciones autonómicas por primera vez, su portavoz y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha asegurado que están estudiando denunciar a la Xunta por «inacción». Ha criticado la «falta de respuesta, transparencia e inacción» del Gobierno gallego, a quien ha acusado de aplicar tarde el plan de contingencia para recoger los plásticos de las playas.
«Estamos estudiando denunciar la inacción de la Xunta ante el Contencioso-Administrativo por falta de acción, por incumplimiento del Decreto que regula el Plan Territorial de Contingencias de Contaminación Marina«, ha concretado Urtasun.
El portavoz de Sumar ha comparado también esta situación con la de la crisis del ‘Prestige’. «Nos retrotrae a aquel PP que nos negó que el ‘Prestige’ iba a ser una catástrofe ambiental cuando hablaban de ‘hilillos» y ha acusado a la Xunta de estar «otra vez minimizando lo que es una crisis ambiental grave».
En este sentido, la Xunta descartó elevar el nivel 1 de emergencia -el mínimo- al 2, y sostiene que los técnicos y los biólogos «no lo creen necesario», asegurando que «los pellets no son ni tóxicos ni peligrosos». Señala que son plástico que hay retirar y evitar que quede enterrado en la arena.
Sin embargo, la Unidad Especializada en Medio Ambiente de la Fiscalía General del Estado ha abierto diligencias de investigación sobre el vertido y, en este sentido, precisan que esta unidad ya abrió expediente de seguimiento de la situación el día 4 de enero.