A los oídos del mandatario estadounidense ya habían llegado las comparaciones pronunciadas por Caballero, pero ha tomado la decisión definitiva después de enterarse de que la NASA había alertado de que la iluminación de Vigo era visible desde el espacio y que este 2017 su urbe había sido superada por una localidad de casi 300.000 habitantes.
Además, De Blasio se ha sentido seducido por los grandilocuentes paralelismos de Caballero. “Si un político aspira a deslumbrar como la mayor ciudad del mundo perfectamente podría ser alcalde de la mayor ciudad del mundo”, ha declarado.
Haber contratado a la misma empresa de alumbrado ha facilitado todavía más las cosas y la intermediación de la firma española encargada de dar luz a Vigo esta Navidad ha sido clave para que la petición llegue al despacho del regidor olívico.
Según han confirmado a VIGOÉ fuentes municipales, Caballero no quiere dejar pasar esta oportunidad para dar un golpe de efecto. Además de pasearse por Príncipe con su homólogo neoyorquino ante la presencia de medios locales y nacionales, el alcalde tiene previsto poner sobre la mesa una contraoferta.
Tras comprobar el éxito que ha tenido la instalación de la bola que rinde homenaje a la Estrella de la Muerte junto a la farola de Urzaiz, el primer edil vigués solicitará la ayuda de De Blasio para que, junto al alcalde de Los Ángeles, el también demócrata Eric Garcetti, consiga que los actores protagonistas de Star Wars inauguren el alumbrado navideño del próximo año, que incluirá una réplica del Halcón Milenario llena de luces.
Desde el Concello saben que el reto es mayúsculo y por eso Caballero ha hecho una promesa. Si consigue el compromiso de los dirigentes norteamericanos, se subirá a los escenarios el próximo 1 de enero, durante la celebración del Año Nuevo en As Travesas, junto a Tony Lomba para cantar a dúo la canción que le ha dedicado el músico vigués.
El regidor es sabedor de que esa actuación se convertiría en el preludio perfecto para el concierto de “un millón de personas” que anunció para este verano. Eso, si es que la propia actuación conjunta de Caballero y Lomba no alcanza ya de por sí esa cifra de asistentes.
Como no podía ser de otra manera, el mandatario neoyorquino sería uno de los invitados estelares a la fiesta de Fin de Año. Al menos esa sería la voluntad de Caballero, que quiere pronunciar ante él y la multitud que acuda a la celebración una frase muy especial que ya tiene preparada: “Como político aspiro a deslumbrar como la mayor ciudad del mundo, pero ya soy alcalde de la mejor ciudad del mundo”.