La Guardia Civil investiga a un conductor que, el pasado sábado, fue sorprendido circulando a 182 kilómetros hora por la VG-4.1, en un tramo limitado a una velocidad máxima de 90 kilómetros por hora, a la altura del municipio de Sanxenxo.
Según han informado fuentes de la Comandancia, el conductor, un varón de 40 años de edad, vecino de Sanxenxo, fue interceptado a bordo de un Audi en el punto donde se encontraba la patrulla de la Guardia Civil del destacamento de Pontevedra notificando las infracciones.
El hombre fue denunciado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, y se enfrenta a penas de prisión de hasta 6 meses, multa hasta 12 meses o 90 días de trabajos comunitarios. En todo caso, su actuación implica la pérdida del carné por un tiempo que puede ir de uno a cuatro años.