La Dirección General de Tráfico (DGT) pone en marcha desde este lunes 30 de noviembre y hasta el próximo viernes día 4 de diciembre una campaña especial de vigilancia y control del transporte escolar. En ella, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y las policías locales que se sumen comprobarán que tanto autobuses como conductores cumplan con la normativa establecida en la materia, que incluye, entre otras obligaciones, la necesidad de que los menores vayan acompañados por una persona debidamente cualificada en los desplazamientos.
Esta campaña tiene una especial trascendencia en Galicia debido a la gran extensión de rutas de transporte escolar existentes en la comunidad. Según los datos de las autoridades educativas, en el presente curso 2020-21 se presta servicio de transporte escolar a 86.957 alumnas y alumnos de 774 centros públicos
Aunque la vigilancia por parte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil es permanente, en los próximos días se intensificarán los controles preventivos, especialmente en carreteras convencionales y en vías urbanas. El objetivo es concienciar a padres, responsables educativos y conductores de autobuses de la necesidad de cumplir las normas establecidas con respecto a este tipo de transporte.
Se realizarán controles de carácter administrativo sobre las autorizaciones y documentos que deben tener dichos vehículos para la correcta prestación del servicio. También se verificará que las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como son el permiso de conducción y los tiempos de descanso. Entre las condiciones de seguridad que deben cumplir todos los transportes escolares, se estipula la antigüedad máxima de los vehículos destinados a este tipo de pasajeros, el seguro de responsabilidad civil ilimitado o la obligatoriedad de llevar la señal de transporte escolar.
Seguridad y menores
De acuerdo con las estadísticas de la DGT, el 90% de los accidentes que se producen durante el transporte escolar tienen lugar en el momento de subir o bajar del vehículo, o justo en los instantes inmediatos y, en muchos casos, se trata de atropellos causados por una distracción del menor, del conductor del transporte escolar o de los acompañantes.
En la campaña equivalente de control de transporte escolar realizada en febrero de este año, se controlaron 463 vehículos de este tipo, llegando a formular 352 denuncias a 206 autobuses.
Las irregularidades administrativas son las que mayor número de denuncias generaron. Por ejemplo, no disponer de la autorización especial para realizar transporte escolar supuso la interposición de 102 denuncias, prácticamente una de cada tres.