El pleno del Concello de Pontevedra ha aprobado por unanimidad este lunes una propuesta del grupo municipal del Partido Popular relativa a la liberalización del tramo de autopista Pontevedra-Curro, para hacer más competitivo el polígono de Barro, unir toda la comarca de O Salnés con la capital y restringir el tráfico pesado en la PO-531, entre otras razones defendidas.
Igualmente, toda la corporación ha apoyado la enmienda presentada por el grupo municipal del PSOE para exigir que tampoco se cobre a los conductores que circulen hacia el sur, retirando el peaje en Figueirido (Vilaboa), para mejorar la conectividad de la capital de la provincia con Vigo.
El debate se ha desarrollado en el Teatro Principal en una sesión más tranquila de lo habitual, en la que el portavoz del PP, Rafa Domínguez, ha reclamado al Gobierno de España que tenga con los pontevedreses el mismo trato que tienen los vecinos de Vigo, Cangas o Redondela, que han logrado liberalizar sus respectivos tramos de la AP-9.
«Tenemos que mandar un mensaje contundente, porque es indecente que tengamos que pagar», ha sostenido Rafa Domínguez.
Por su parte, el concejal de Infraestructuras, el nacionalista César Mosquera ha agradecido que esta moción llegase al pleno «limpia y dirigida exclusivamente a liberar el peaje con Curro», sin tener que abordar la historia de la AP-9.
El portavoz socialista Iván Puentes ha criticado que los populares «son tremendamente exigentes cuando no gobiernan los suyos y tremendamente sumisos cuando están gobernando».
El debate plenario continuó con la proposición del grupo municipal del PSdeG-PSOE relativa a la creación de un sistema interno de información que permita que personas detecten infracciones penales o administrativas puedan denunciarlo, manteniendo la confidencialidad y protegiendo al informante de posibles represalias. La propuesta ha sido aprobada.