Las fotocopiadoras son herramientas con un rol esencial en las oficinas de empresas. Incluso en los últimos años en ciertos hogares que se han adaptado para hacer home office, según el rol que cumplan en su trabajo, se han venido implementando.
Su compra es una inversión, por ello es recomendado hacerla en tiendas o plataformas que te ofrezcan calidad, como en https://www.inforcopy.es/venta-fotocopiadoras-impresoras/.
Sin embargo, sea que compres en el sitio indicado u otro, para que funcionen de manera eficiente y duren más tiempo, es crucial darles un mantenimiento.
Ubicación adecuada y segura
Es recomendable mantenerla en un espacio seco y limpio, lejos de fuentes de calor, humedad o luz solar directa. Estas condiciones adversas pueden afectar los componentes internos del equipo y reducir su vida útil.
Además, ubicarla en espacio que tenga suficiente ventilación es parte de la tarea para evitar el sobrecalentamiento, especialmente si es utilizada constantemente.
Haz una limpieza regularmente
Al hacer la limpieza no hace falta desarmarla o abrirla, en realidad, con que sea superficial bastará, ya para una más profunda se debe dejar en manos de profesionales.
Recordemos que el polvo y la suciedad son enemigos naturales de cualquier equipo electrónico, y las fotocopiadoras no son la excepción. Límpiala de forma regular con paños suaves y productos recomendados por el fabricante.
Presta especial atención a las superficies exteriores, la bandeja de alimentación y el vidrio del escáner para que esté bien.
Usa consumibles de calidad
Quizás parezca una tontería, pero la realidad es que el uso de papel y tóner de baja calidad puede provocar atascos frecuentes y dañar los mecanismos internos. Es mejor invertir en consumibles recomendados por el fabricante o compatibles de buena calidad.
Asimismo, verifica que el papel sea del tamaño y gramaje adecuados para el modelo. No hagas uso de papel húmedo o dañado, ya que genera problemas en la alimentación.
Realiza el mantenimiento preventivo
No esperes a que la misma presente problemas para darle arreglo con profesionales. Programa revisiones periódicas con técnicos especializados para tener la garantía de que todas las piezas están en buen estado.
El mantenimiento preventivo incluye revisar rodillos, sensores, fusores y otras partes críticas del equipo. Estas inspecciones regulares pueden prevenir fallas bastante mayores y reducir los costos de reparación.
No fuerces en caso de atascos
Los atascos de papel son comunes, pero es importante manejarlos con cuidado. Si ocurre un atasco, apaga la fotocopiadora y sigue las instrucciones del manual para retirarlo.
Evita usar objetos afilados o tirar del papel bruscamente, ya que podrías dañar los rodillos o engranajes. Si no puedes solucionar el problema, es mejor contactar a un técnico capacitado.
Apaga el equipo cuando no esté en uso
Si se deja encendida constantemente puede generar un desgaste innecesario en sus componentes, y eso ni hablar del hecho de que aumenta el consumo de energía. Apágala al final de la jornada laboral o cuando no se vaya a usar por largos periodos.
Además, muchas modernas cuentan con un modo de ahorro de energía que puedes habilitar para reducir el impacto ambiental y los costos operativos.
Capacita al personal en su uso
Una de las causas más comunes de averías de estos equipos, es el uso incorrecto por parte de los usuarios. Mira que todos los empleados sepan cómo utilizar el equipo correctamente.
Proporciona capacitaciones breves sobre cómo realizar copias, cambiar el tóner, y manejar atascos simples. Esto previene problemas, y claro aumenta la eficiencia en el lugar de trabajo.
Haz las actualizaciones necesarias
Si tu fotocopiadora está conectada a una red o computadora, es esencial que estén actualizadas con sus controladores y software. Las actualizaciones suelen incluir mejoras en el rendimiento, correcciones de errores y compatibilidad con nuevos sistemas operativos.
Consulta el sitio web del fabricante para descargar las versiones más recientes de los controladores si es que la hubiera.
Cuidado con el uso excesivo
Aunque las fotocopiadoras están diseñadas para manejar grandes volúmenes de trabajo, no es recomendable sobrecargarlas. Revisa el manual para conocer la capacidad máxima de copias diarias que soporta el modelo y respeta ese límite.
Si necesitas realizar copias masivas regularmente, considera adquirir un equipo diseñado para cargas de trabajo intensivas.
Contrata un servicio técnico de confianza
En caso de problemas o fallas, confía en un servicio técnico especializado como el que igualmente hallas con www.inforcopy.es. Procura no recurrir a técnicos sin certificación, ya que podrían causar más daño al equipo.
Un servicio técnico de confianza garantiza reparaciones de calidad y el uso de piezas originales, lo que prolonga la vida útil de la fotocopiadora.