La Guardia Civil ha investigado a un joven de 26 años, vecino de O Rosal, por supuestamente ocasionar daños en el mobiliario urbano con su coche y denunciar falsamente el robo del mismo vehículo.
Según informa el Instituto Armado, todo se inició el 23 de mayo, cuando un responsable del Ayuntamiento de A Guarda presentó una denuncia conforme días atrás un coche había derribado señales y vallas de un aparcamiento público. Los daños ascendían a más de 3.800 euros.
La investigación de los agentes pudo determinar que la madrugada del 19 de mayo un vehículo, propiedad del investigado, había sido observado en el aparcamiento de una playa mientras realizaba derrapes y causaba destrozos. Posteriormente, protagonizó una salida de vía a escasos 200 metros de ese lugar.
Pese a que el joven había dicho que le habían sustraído el coche, las gestiones realizadas por la Guardia Civil y las declaraciones de algunos testigos permitieron determinar que era él mismo el que conducía el turismo aquella noche.
Por tanto, las diligencias por un supuesto ilícito de daños y por otro de simulación de delito fueron entradas en el Juzgado de Instrucción de guardia de Tui.