Las investigaciones se iniciaron a finales del pasado año cuando la Guardia Civil tiene fundadas sospechas de que en una nave, que podría estar ubicada en la zona de O Rosal, se estaría realizando un cultivo de marihuana de tipo «indoor» y que, probablemente, fuera distribuida en la localidad de Vigo e incluso exportada a algún país extranjero.
Las pesquisas realizadas por el Equipo de Investigación de la Guardia Civil de Tui, en colaboración con los efectivos del Puesto de A Guarda permitieron ubicar la nave en una parroquia del municipio de O Rosal y, además, también fueron decisivas para confirmar las sospechas, suficientemente argumentadas, para que el Juzgado de Instrucción Nº 3 de Tui librase mandamiento de entrada y registro.
En el registro, la Guardia Civil comprobó que la nave, un antiguo taller mecánico que lleva cerrado desde hace bastante tiempo, se encontraba dotada de todos los medios técnicos necesarios para este tipo de cultivos, con una importante cantidad de elementos mecánicos y eléctricos suficientes para procurar la ventilación, refrigeración y temperatura adecuada para estos fines, cuyo valor puede superar los 40.000 euros.
En el interior se intervinieron un total de 42 kilos de cogollos secos, preparados para su consumo, 28 kilos de marihuana también seca, además de 28 condensadores eléctricos, lámparas y fertilizantes.
La nave se encontraba compartimentada en tres espacios diferenciados donde se llevaban a cabo las diferentes etapas del cultivo, estimando que tenía un potencial de producción de unas 800 plantas en cada cosecha.
Como único responsable, hasta el momento, la Guardia Civil procedió a la identificación de la persona que tenía alquilado esta nave, A.P.A., de 31 años, vecino de Vigo, a quién se le investiga como supuesto autor de un delito contra la salud pública y otro de defraudación del fluido eléctrico, teniendo en cuenta que esta persona estaba utilizando la red pública para abastecerse de la corriente que se utilizaba en el interior de la nave.