La Guardia Civil sorprendió durante la madrugada de este miércoles en Guillarei a un joven de 18 años, vecino de Tomiño, con 300 litros de gasóleo que supuestamente había sustraído en O Porriño.
Una patrulla de seguridad ciudadana del Puesto de Tui interceptó a un vehículo que les infundió sospechas cuando circulaba con notorio exceso de velocidad por la carretera N-550, a la altura de Guillarei.
Al inspeccionar el coche se comprobó que, tanto el conductor como el automóvil, desprendían un fuerte olor a gasoil. Además, llamó especialmente la atención el hecho de que la mayor parte de los elementos del habitáculo de la parte delantera (volante, palanca de cambios, asientos, etc.,) estaban recubiertos y protegidos con plástico.
Las sospechas se despejaron inmediatamente al comprobar que en el interior del maletero y en los asientos traseros, que llevaba plegados, transportaba un total de 24 garrafas de plástico llenas con 21 litros de gasoil cada una.
“Enseguida se pudo comprobar que el carburante que llevaba en las garrafas había sido sustraído, apenas dos horas antes, del interior de los depósitos de tres camiones que estaban estacionados en la parroquia de Budiño, en O Porriño”, informa la Benemérita.
La actuación concluyó con la recuperación del combustible, la intervención cautelar del vehículo y la detención del conductor como supuesto autor de un delito de robo. El sospechoso quedó en libertad en sede policial, con la obligación de comparecer en el Juzgado cuando sea requerido. Las diligencias instruidas se entregaron en el Juzgado de Instrucción de guardia de Tui.