Según señala en la nota, fueron varios los vecinos residentes del casco histórico los que dieron la voz de alarma al comprobar que el agua salía muy turbia del grifo y que no se podía consumir. El Concello ya se puso en contacto con la empresa responsable de la depuración del agua en el municipio y los técnicos de ésta ya están trabajando para solucionar el problema en el menor tiempo posible.