En la actuación de los agentes, que se centró fundamentalmente en la realización de sendos controles de carretera en el Puente Internacional de Tui y posteriormente en la carretera PO-552, en la localidad de A Guarda, se inspeccionaron tres vehículos que transportaban en total 121 kilos de pescado.
De ellos, 40 kilos eran especies en veda y los 81 restantes no tenían ninguna documentación que pudiese justificar su legal procedencia. El pescado fue requisado y entregado en un centro benéfico.
Por su parte, los tres conductores fueron denunciados como supuestos autores de una infracción grave a la vigente Ley de Pesca de Galicia y se enfrentan a una sanción económica de hasta 60.000 euros.