El juzgado de instrucción 1 de Ponteareas (Pontevedra) ha dictado auto de apertura de juicio oral contra el hombre acusado de haber asesinado a otro varón asestándole entre 80 y 90 cuchilladas en un hostal de Mondariz, en enero de 2021, y ha requerido una fianza de 400.000 euros al procesado.
Según han confirmado a Europa Press fuentes jurídicas, también se ejerce la acción contra la FUNGAS (Fundación Pública Galega para a Tutela de Persoas Adultas) como responsable civil, ya que la entidad tenía la curatela del acusado en el momento del crimen.
Una vez presentados los escritos de las partes, ahora el señalamiento del juicio, que se realizará con tribunal de jurado, corresponde a la Audiencia Provincial de Pontevedra.
Los hechos
La Fiscalía pide 17 años de prisión para este hombre por un supuesto delito de asesinato y, según se recoge en el escrito de acusación, los hechos ocurrieron en enero de 2021, cuando acusado y víctima eran los únicos huéspedes de un hostal en Mondariz, y mantenían una mala relación de vecindad porque, al parecer, el acusado ponía música a gran volumen de madrugada, daba golpes en la pared y pedía con frecuencia tabaco a la víctima.
La víctima, que llevaba 17 años viviendo en ese establecimiento, trasladó a la propietaria del negocio sus quejas por la actuación del acusado y éste, al enterarse, le dijo al otro huésped que lo había «jodido» y que lo iba a «pasar por la piedra».
El 9 de enero de 2021, el acusado compró un cuchillo de cocina en un bazar de Ponteareas, con unas características que, según el informe forense, son compatibles con las múltiples heridas que presentaba el cuerpo de la víctima («entre 80 y 90» lesiones incisas por arma blanca).
La Fiscalía sostiene que, en algún momento entre la tarde del 17 de enero (cuando la víctima fue visto con vida por última vez) y la noche del 22 de enero (cuando fue localizado su cadáver), el acusado lo acuchilló hasta matarlo.
El procesado fue diagnosticado hace años de psicosis esquizofrénica paranoide y estuvo hospitalizado en varias ocasiones. Asimismo, consta que no tiene una buena adherencia al tratamiento que debe recibir de modo crónico.
Por estos hechos, lo acusa de un delito de asesinato, y pide que se le aplique la atenuante de alteración psíquica, ya que es posible que, en el momento de los hechos, tuviera una disminución parcial de su capacidad volitiva, aunque no conste una merma en sus facultades intelectivas.
Así, reclama que se le imponga la pena de 17 años de cárcel y que se le prohiba acercarse o comunicarse con los parientes de la víctima por un período de 23 años. También pide que indemnice a los familiares del fallecido.