Esta obra de arte no figura en ningún museo, pero es admirada por todas las personas que pasan frente a ella cuando van camino del cementerio de Ponteareas. La talla, realizada a tamaño natural en piedra, está colocada en el Alto da Gloria, en la bifurcación que se dirige el cementerio municipal. Las figuras representan al hombre y a la mujer que aparecen en una fotografía que alguien ha colocado en el respaldo del banco. En el conjunto escultórico ha conseguido inmortalizar a esas personas y también incluye un perro, como puede observarse. Es cierto que las tallas presentan la tosquedad de quien las ha realizado con prisa, seguramente porque sus obligaciones laborales no le permitían dedicarle más tiempo. Sin embargo, la escultura merece el aprecio y la admiración porque está llena de cariño y constituye un grato recuerdo para los familiares y amigos de los protagonistas.