Las intensas lluvias caídas durante las últimas horas han provocado numerosos incidentes en el área metropolitana de Vigo, aunque por fortuna ninguno de ellos de gravedad. Los mayores problemas se registraron por el desbordamiento del río Tea, a su paso por la parroquia de Moreiras, donde fue necesaria la intervención de la Guardia Civil.
Así, agentes de los puestos de Ponteareas y A Cañiza, con ayuda de los Bomberos y Protección Civil, participaron en el dispositivo de auxilio de varias personas que tuvieron que ser rescatadas de sus domicilios anegados por el agua, con motivo del desbordamiento del Tea. Se trató de un matrimonio con sus dos hijos pequeños y un hombre de 80 años que no podían salir de sus viviendas al resultar inundadas.
Por su parte, la Agrupación Municipal de Protección Civil de Ponteareas informó de que dispone de voluntarios de guardia desde la pasada noche con motivo del temporal. También hubo problemas se concentraron en A Freixa, donde la carretera que une Ribadetea con la N-120 quedó cortada al tráfico. Además, también está cerrada la carretera que une Nogueira con Moreira, al igual que el puente de As Partidas y A Moscadeira.
En Vigo varios desprendimientos de tierras obligaron a cortar viales a lo largo del día viales como Baixada A Salgueira y la rúa Paz Pardo.
La Xunta de Galicia activó el Plan Especial de Risco de Inundaciones en Galicia en fase de alerta debido a un aumento del caudal en diversos cursos fluviales. Así, los sistemas de observación de los diferentes organismos de cuenca detectaron niveles significativamente altos.
De este modo, en las últimas horas, los ríos que alcanzan los niveles de alerta son dos en la provincia de Lugo: Ladra (Begonte) y Labrada (Fraga-Vilalba); tres en la provincia de A Coruña: Mandeo (Aranga), Tambre (Oroso) y Furelos (Santiso); y cuatro en la provincia de Ourense: Arnoia (Baños de Molgas), Sil (O Barco de Valdeorras), Miño (A Peroxa) y Támega (Castrelo de Val).