Accidentes, retenciones, trazado sinuoso, deficiente asfaltado, radares… y ahora derrumbes. La autovía A-55 (Vigo-Tui) es un auténtico calvario para los conductores. Da igual el mes, el día o la hora, circular por esta autovía siempre conlleva un importante peligro para los conductores.
Este Sábado Santo era difícil conducir por la A-55 debido a las malas condiciones meteorológicas, pero la situación empeoró a última hora de la tarde. Un derrumbe registrado en la carretera obligó a cerrar un carril de la circulación en Puxeiros.
Los hechos ocurrieron sobre las 20:00 horas cuando el barro procedente de un muro de contención llegó hasta la calzada. La cantidad de agua y tierra ocupó parte del carril sentido Porriño.
Hasta la zona se desplazaron efectivos de conservación de carreteras, que señalizaron la zona y trabajaron para restablecer la circulación.
El proyecto para construir un túnel bajo la A-55 ha generado una gran controversia. Los vecinos de Bembrive denuncian que la nueva infraestructura causará daños irreparables en la parroquia. Además, desde el Concello de Mos, su alcaldesa Nidia Arévalo también se ha opuesto.