Tras la denuncia de Ecologistas en Acción, el Concello de Mos tomó muestras para analizar el vertido detectado en las inmediaciones de la Ciudad Deportiva del Celta, Afouteza. Y como señaló en su día la alcaldesa Nidia Arévalo, informaría de los resultados.
Pues bien, desde el concello mosense señalan que las analíticas realizadas por «un laboratorio con acreditaciones para este tipo de análisis de aguas, y con trazabilidad, dieron un resultado óptimo conforme a la legislación vigente».
Así, la regidora ataca directamente a los ecologistas lamentando «nuevamente» una «alarma social innecesaria e infundada, con una clara intencionalidad política». Y menciona claramente a Ecologistas en Acción, Agua y Vida y la Comunidad de Montes de Tameiga.
Según considera, se trata de una “estrategia que vienen desarrollando desde 2017 cada vez que hay elecciones”, señaló en un comunicado enviado a la prensa.
Con todo, Arévalo informó de que, tras enviar a técnicos municipales el pasado 13 de mayo, cuando se produjo la denuncia de los ecologistas, se supervisó la toma de muestras «en las que se recogieron aguas, se midió el caudal, se tomó la temperatura de las aguas y se inspeccionó y se comprobó el estado de las balsas de arroyo y la red de saneamiento», especifica.
Tras ello, las muestras «se trasladaron al laboratorio para su posterior análisis siendo los resultados de las analíticas y declaraciones responsable de toma de muestras, óptimas, tal y como era previsto».
Y va más allá ya que explica que, del informe del laboratorio, se extrae que los resultados de las analíticas «no coinciden en absoluto con los resultados de la analítica que aporta Ecologistas en Acción” y que “las aguas analizadas son empleadas para riego y no se trata de ningún tipo de vertido de aguas fecales», matiza.
Asimismo, señala que «no se está infringiendo la vigente legislación» apuntando más concretamente que realmente «se trata de aguas que rebosan de unas balsas destinadas para riego».
Es por ello que Arévalo insiste en que “las acusaciones realizadas, además de falsas, son muy graves y, como se puede comprobar, los resultados de las analíticas contradicen estas afirmaciones”.
Y concluye: «ya hace unos días, cuando técnicos municipales acudieron a supervisar e inspeccionar la zona para verificar el origen y la calidad de las aguas, constataron que parecían limpias, lo que ahora se viene a confirmar con los resultados de las analíticas en la mano».