La Policía Local de Cangas reconstruye este miércoles día 31, el trágico accidente mortal ocurrido el pasado viernes, 26 de julio, a la altura de la Praza de Abastos del municipio morracense y en el que falleció el joven marinero Miguel Pereira, de 36 años de edad.
El objetivo del cuerpo de seguridad local es ofrecer una visión esclarecedora del suceso e incorporar los resultados de esta reconstrucción al atestado cerrado ya este fin de semana tras el paso a disposición judicial del detenido, un joven de 31 años que conducía un Porsche Cayenne.
La iniciativa de llevar a cabo esta acción -en colaboración con la Academia Galega de Seguridad Pública (AGASP)- surge como una acción propia del cuerpo de seguridad local, como así confirmó el jefe de la Policía Local de Cangas, Alberto Agulla, con el fin de «ampliar los informes técnicos» que luego se pasarán a la instrucción judicial abierta.
De este modo, los agentes municipales han tenido que cortar el tráfico durante un buen tramo de la mañana de este miércoles en el entorno de la céntrica plaza canguesa para poder sobrevolar un dron -pilotado por el experto Álvaro Louro- con el que tomarán imágenes más detalladas y hacer las correspondientes mediciones con el objetivo de conseguir pruebas periciales en el lugar del siniestro e intentar determinar así, aproximadamente, la velocidad a la que circulaba el coche que impactó contra el Opel Corsa del joven fallecido.
Levantamiento de señales, hitos y la delimitación de la zona del accidente pero también la previa en la Avenida de Marín fueron las pruebas realizadas durante toda la mañana, rematando los trabajos de comprobación sobre las 12:00 horas.
Así, un operativo total formado por unos cinco agentes de la Policía Local y dos profesionales expertos del equipo de reconstrucción de accidentes de tráfico de la AGASP de A Estrada, trabajaron esta mañana en Cangas, lo que ha levantado también la curiosidad de los viandantes de la zona.
El fatídico accidente tuvo lugar el pasado viernes, 26 de julio, sobre las 6:15 horas de la mañana cuando el coche de alta gama -que estaba siendo perseguido por la Policía presuntamente por haberse saltado un control-, embistió al utilitario de Miguel Pereira, el joven cangués que regresaba de trabajar en el mar.
Tras la detención de los ocupantes, el conductor dio positivo en alcohol y drogas, pasando el domingo a disposición judicial en el Juzgado de Instrucción número 2 de Cangas, en funciones de guardia, decretando la jueza el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza.