Un hombre acusado de un delito de abuso sexual continuado contra una menor y un delito de exhibicionismo, que se enfrenta a 6 años de cárcel, ha negado este martes los hechos ante el tribunal y ha atribuido la denuncia a la «confusión», «falta de cariño» o necesidad de «llamar la atención» por parte de la menor.
Así lo ha manifestado ante la sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, donde se ha celebrado la vista por estos hechos. Según la Fiscalía, el hombre realizó tocamientos en los genitales, por encima de la ropa, a la víctima, cuando tenía entre 5 y 6 años, y se masturbó en varias ocasiones delante de ella, aprovechando que ambos convivían, puesto que él era pareja de la madre de la menor.
En su comparecencia ante el tribunal, el procesado ha negado haber hecho tocamientos a la niña, ni haberse masturbado en su presencia y, al ser preguntado por la motivación de la denuncia (interpuesta en 2021) ha proclamado: «Creo que fue un desbarajuste de la niña, no sé si la falta de cariño, confusión o querer llamar la atención. No tengo otra explicación».
El ministerio público pide inicialmente 6 años de prisión para él, y que indemnice a la víctima, que ahora tiene 16 años, en 25.000 euros.
Declaración de la víctima
Por otra parte, la menor ha declarado también en la vista, tras un biombo para no tener contacto visual con el acusado, y se ha reafirmado en su denuncia de los hechos.
Según ha relatado, ambos convivieron durante un tiempo en Cangas, junto a la madre de ella y a otra hermana, hija de la pareja. En el año 2014, cuando la víctima tenía «entre 5 y 6 años», fue cuando supuestamente ocurrieron los hechos.
La testigo ha relatado entre lágrimas un episodio en el que el acusado y ella se encontraban solos en el domicilio, en el sofá del salón y, según su versión, «él puso una película ‘porno’ y empezó a masturbarse», al tiempo que le tocaba los genitales por encima de la ropa. «Yo no sabía qué estaba pasando, me encerré en mi habitación y luego me escapé al trabajo de mi madre», ha explicado.
Igualmente, ha narrado otros dos momentos en los que, ha afirmado, el acusado se masturbó delante de ella. Posteriormente, la menor dejó de convivir con su madre y su pareja, para trasladarse con su abuela.
Años después, en 2021, en una sesión de terapia con una psicóloga, la joven confesó lo ocurrido y su abuela la animó a poner la denuncia.