La asociación de viviendas turísticas de Galicia (Aviturga) ha denunciado la existencia de un «elevado porcentaje» de alojamientos de este tipo sin registrar ante la Xunta de Galicia, un trámite obligado para recibir a huéspedes.
Para ello, este colectivo ha puesto en marcha una campaña para acabar con esa irregularidad en el mercado de alquiler de viviendas de uso turístico enfocado especialmente a las zonas balnearias de Sanxenxo y O Grove, así como localidades de la comarca de O Morrazo.
Aviturga ha detectado también una necesidad de asesoramiento en este sentido a los propietarios de viviendas situadas en distintas rutas jacobeas, ya que su reactivación tras la pandemia ha animado a muchos ofrecer esas «alternativa de alojamiento».
La presidenta de Aviturga, Dulcinea Aguín, indica que Galicia debería ofrecer «confianza a los visitantes» y en eso incluye que los propietarios de viviendas turísticas cumplan la normativa.
En caso de incumplimientos, las sanciones previstas por la Xunta superan los 600 euros frente a un gasto de legalización que no llega a 60 euros, apunta.
«No vale la pena correr ningún riesgo», apunta Aguín, e indica que el problema de la regularización de viviendas «no es común» a toda Galicia, sino que se centra principalmente en lugares que concentran el mayor número de visitantes.