La Valedora do Pobo, Dolores Fernández Galiño, ha mantenido este viernes una reunión con las familias de las víctimas del naufragio del pesquero ‘Villa de Pitanxo’ en aguas próximas a Terranova (Canadá), que dejó 21 muertos y solo tres supervivientes, con quienes se ha mostrado dispuesta a colaborar para que se esclarezcan las causas de este siniestro.
Las familias de los marineros han conversado durante casi hora y media con Galiño, en presencia de los medios de comunicación, a quienes han explicado que sus principales reivindicaciones pasan por que se baje al buque hundido para comprobar su estado, recoger evidencias y supervisar si todavía hay cuerpos en su interior .
Además, las familias piden que se ofrezca a los afectados información fidedigna y transparente desde las administraciones.
La Valedora ha expuesto que este asunto excede su margen competencial, ya que involucra directamente al Gobierno central, aunque ha trasladado su intención de trabajar de forma conjunta con la institución del Defensor del Pueblo para que se puedan atender los requerimientos de las familias.
«Entiendo que la petición, de momento, va por que se investiguen las causas del accidente y, dentro de esa investigación, se está poniendo también de manifiesto que lo que se tenga se proporcione» a los afectados de forma clara y sin alteraciones, ha afirmado Galiño, que se ha declarado comprometida con que se pueda «hacer justicia» con esta tragedia.
Durante la reunión, ha sido la portavoz de las familias, María José de Pazo, la que ha llevado la voz cantante en casi todo momento para relatar a la Valedora sus «meses de periplo por muchas administraciones», que en muchos casos les han dado «falsas esperanzas» acerca de sus verdaderas intenciones de bajar al pecio y recoger pruebas de lo acontecido.
«Hay que investigar», ha insistido, puesto que «hay dos versiones que difieren», la de la compañía armadora y el patrón, por una parte; y la de uno de los supervivientes, Samuel Kwesi, por otra.
Esta última, que podría conllevar responsabilidades legales por hasta 21 homicidios imprudentes, es -según Pazo- la que las hipótesis «de los expertos» sitúan como la «más coherente» hasta el momento en base a varios parámetros.
Por este motivo, ha dicho no entender qué lleva al Gobierno central a poner trabas o fabricar «excusas» para oponerse a descender al barco hundido, dado que se trata de un asunto que debe esclarecerse y esta inspección submarina es necesaria, «aunque no aparezca ningún cuerpo» más de los doce todavía desaparecidos, ha señalado.
En este sentido, las familias han asegurado sentirse muy agraviadas con el trato recibido y con que el Ejecutivo se ampare en su petición inicial de recuperar todos los cuerpos para justificar su rechazo a descender hasta el pecio, dado que las familias ya han desmentido que quieran supeditar el grueso de las actuaciones a la recuperación del resto de cadáveres.
Según Pazo, el barco es el «tercer testigo» de esta tragedia y podría aportar datos clave para su esclarecimiento, por lo que no encuentra sentido a renunciar a esta investigación cuando no se ha ofrecido «ningún tipo de informe» ni documentación que constate la imposibilidad de bajar al buque.
Incluso la embajadora de Canadá en España, Wendy Drukier, con la que los afectados mantuvieron una reunión esta semana, les pudo confirmar -ha indicado la portavoz- que, desde un punto de vista legal y competencial, era perfectamente viable descender al buque, cuyo paradero concreto todavía no ha sido determinado.
«En Canadá nos dieron más facilidades y apoyo que nuestro propio gobierno», ha lamentado Pazo, que ha querido ligar la postura de Ejecutivo central a que la información que llega a sus dirigentes sobre la materia «no es veraz», dado que ha dicho no entender cualquier otra razón para su comportamiento.
«Nosotros no queremos follones, ni bullas ni andar insultando a nadie», ha remarcado, sin dejar de insistir en que existen varias opciones que no supondrían «una millonada» para las arcas del Estado y que permitirían localizar el barco, inspeccionarlo y conseguir nuevos datos acerca de lo que sucedió.
Otro de los temas abordados durante la reunión ha sido el de los casos de covid-19 detectados entre los tripulantes del ‘Villa de Pitanxo‘, toda vez que -según mensajes enviados por los marineros a sus familiares- podrían haberse infringido varios puntos de los protocolos sanitarios sobre cómo proceder ante un brote en la embarcación.
«Fue una de las preguntas que remitimos a Madrid y no contestaron», ha aclarado Pazo, que tampoco ha podido confirmar hasta el momento si se comunicaron los casos de coronavirus al centro médico, del que debería existir un reporte.
Los familiares de las víctimas del naufragio del ‘Villa de Pitanxo’ también mantuvieron este jueves una reunión con el sindicato Comisiones Obreras, a quien reclamaron mayor implicación en la defensa de los derechos de los trabajadores fallecidos. Por su parte, la organización sindical les avanzó su afán de «agilizar» la tramitación de las pensiones de viudedad y orfandad correspondientes, así como las peticiones de documentación a terceros países.