La presidenta de la Deputación, Carmela Silva, y el alcalde de As Neves, Xosé Manuel Rodríguez Méndez, se reunieron este jueves con carácter de urgencia acompañados por el vicepresidente del ente provincial, César Mosquera, y el teniente de alcalde del municipio, Eduardo Mariño, por las restricciones en el suministro de agua de la traída en este municipio después de los incendios del pasado verano. Ambos firmaron la concesión de una ayuda por parte de la Deputación de 20.000 euros en base a las necesidades de emergencia del municipio para subsanar esta situación.
La presidenta provincial matizó que «pese a que la Deputación no tiene competencias, ya que quien las tiene es la Xunta como queda claro en la Lei de Emerxencias, entendemos que se trata de un problema real ya que el suministro de agua no se pudo realizar por un problema de salud pública y de seguridad para las personas, circunstancias que nos obligan a actuar al respecto». La Deputación actuará en el alquiler de vehículos y maquinaria, la realización de analíticas diarias y reparaciones en el sistema de abastecimiemto debido a la necesidad de realizar actuaciones urgentes de emergencia social que hagan frente a este imprevisto.
El Concello y la institución provincial estuvieron en contacto desde el pasado viernes, de modo que el lunes la Deputación recibió una solicitud de búsqueda de colaboración por parte del Concello para establecer las medidas necesarias que solucionasen el problema de salud pública y seguridad generados en los últimos días en As Neves. Un día después, el martes, un ingeniero visitó As Neves para evaluar la situación.
Además, Carmela Silva adelantó que «desde la Deputación vamos a pedir que las administraciones competentes den una respuesta estructural a este problema, porque lo precisa». El Concello de As Neves y su alcalde, Xosé Manuel Rodríguez Méndez, ya se pusieron en contacto con estos organismos a la vez que enviaron la solicitud al ente provincial.
As Neves tuvo que restringir durante ocho días el suministro de agua por las cenizas y demás materia orgánica que se depositó sobre el río Termes, problema que aumentó en los últimos días debido a las lluvias. Desde el Concello se advirtió a los vecinos que mientras dure el proceso de bombeo a los depósitos para estabilizar la red de distribución, este jueves y viernes, no es recomendable beber o cocinar con el agua de la traída municipal.