La Guardia Civil investiga penalmente a un vecino de Poio que fue interceptado en Portugal después de saltar un control de alcoholemia en Redondela. Se le acusa de un delito contra la seguridad vial y de otro de resistencia y desobediencia grave porque casi atropella a uno de los agentes que formaba parte del control cuando se dio a la fuga.
Según ha informado este martes el Instituto Armado, los hechos ocurrieron la semana pasada cuando un vehículo se dio a la fuga en un control de verificación de drogas y alcohol que estaba realizando una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Vilaboa, en la carretera EP-2901, a la altura del término municipal de Redondela. El conductor del coche, desobedeciendo las señales de alto, emprendió la huida “a gran velocidad”, teniendo que apartarse bruscamente uno de los guardias civiles del control para evitar ser arrollado.
Al iniciar su persecución, que discurrió por distintas carreteras, pasando por Redondela, Peinador, la parroquia viguesa de Cabral y Tui, las patrullas que lo seguían de cerca pudieron observar que durante todo el recorrido circulaba “de forma totalmente temeraria sin el más mínimo respeto de las normas de circulación y con riesgo evidente, tanto para su propia seguridad como para el resto de los usuarios de la vía”.
Finalmente, el vehículo se introdujo en Portugal donde pudo ser interceptado a escasos kilómetros de la frontera con la colaboración de varias patrullas de la Guardia Nacional Republicana (GNR) y de la Brigada de Tránsito de Portugal. Los efectivos de la policía portuguesa le sometieron a la prueba de alcoholemia, que ofreció como resultado una tasa de 1,20 mg/l en aire espirado. Por este motivo, los agentes instruyeron diligencias por un delito contra la seguridad vial.
En lo que concierne a las infracciones cometidas en territorio español, el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) del Subsector de la Guardia Civil de Pontevedra, le notificó a este conductor su condición de investigado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial y otro de resistencia y desobediencia grave a los agentes de la autoridad. Las diligencias instruidas se entregaron en el juzgado de instrucción de guardia de Redondela, donde deberá comparecer cuando sea requerido por la autoridad judicial.