El transporte de la pieza de 47 metros de largo por ocho de ancho destinada a la ampliación del Puente de Rande se puso en marcha de nuevo tras solucionar los problemas de estabilidad que había sufrido el viernes pasado.
La Guardia Civil de Tráfico reinició el convoy a las 23:30 horas de la noche de este martes después de que técnicos alemanes revisasen a fondo el vehículo especial para comprobar que ya no existe riesgo de caída sobre la calzada.
Desde el área de servicio de Ribadavia, el transporte puso de nuevo rumbo a Vigo ocupando los dos carriles de circulación de la Autovía Rías Baixas (A52), por lo que el tráfico quedó cerrado.
La pieza viaja a una velocidad de 5 kilómetros por hora y tiene previsto llegar a A Cañiza alrededor de las siete de la madrugada, de forma que la Guardia Civil recomienda utilizar carreteras alternativas como la N120 para poder llegar hasta Vigo.
El problema de la pieza, con unas dimensiones de 47 metros de largo y 8 de ancho, se registró el pasado viernes cuando se movieron las fijaciones del camión sobre el que va asentada. Ante el riesgo de una caída que provocase su rotura, los responsables del transporte decidieron suspender la operación.
Este martes fue necesario la presencia de técnicos alemanes para que diesen el visto bueno al transporte.
La dovela es una pieza básica en las obras de ampliación del puente de Rande y en las últimas semanas, la UTE encargada de ejecutar los trabajos ya había comenzado a instalar varios elementos procedentes de la empresa de Carballiño.
