El acusado de haber asesinado a su mujer en diciembre de 2020 en Gondomar (Pontevedra), Valentín A.B., «no mostró pesar ni arrepentimiento» después de los hechos, y tenía «sus capacidades intactas», según han señalado las forenses que han declarado en la jornada del juicio celebrada este martes por la tarde.
Las facultativas que han declarado en la sección quinta de la Audiencia Provicial de Pontevedra, con sede en Vigo, han explicado que el acusado presentaba varias lesiones, todas autoinfligidas, por haber tratado de suicidarse, pero cuando examinado alegó que no recordaba «prácticamente nada». Así, han apuntado que «cuenta solo lo que quiere», haciendo gala de una «memoria selectiva».
Asimismo, cuando fue explorado habló de su «mala relación conyugal» y de que su mujer «lo insultaba», por lo que se sentía «degradado». Sin embargo, las doctoras han explicado que Valentín tiene «rasgos de personalidad paranoide», lo que le hace ser «muy desconfiado».
Al respecto, han matizado que los rasgos de personalidad nada tienen que ver con un trastorno y, de hecho, no tiene diagnosticada ninguna patología psiquiátrica. Según han insistido, no se ha acreditado que, en el momento de los hechos, hubiera sufrido «un brote psicótico» y tiene «su capacidad mental intacta».
Una de las forenses ha recalcado que el acusado «ha mantenido siempre el juicio de la realidad» y que «no colaboraba mucho». De hecho, la muestra de su ADN tuvo que extraerse con mandato judicial, ya que inicialmente se negó ha facilitarla de forma voluntaria.
Las acusaciones piden para Valentín A.B. 30 años de cárcel por asesinar a su mujer, supuestamente, asestándole varias puñaladas; mientras que la defensa pide su libre absolución.