La investigación se inició a finales del año pasado por el Equipo del Seprona de Vigo cuando tiene sospechas de que se estaban utilizando residuos de construcción y demolición mezclados con asfalto en el relleno de la obra de un cementerio en el municipio de Tomiño.
Las pesquisas del Seprona llevadas a cabo para conocer el origen de los residuos de asfalto, considerados peligrosos, que se habían detectado en las obras de relleno del cementerio, determinaron que procedían de las obras de una red de abastecimiento que agua que se estaban realizando en la misma comarca.
Siguiendo la misma línea de investigación, se localizó en dos terrenos contiguos, en el municipio de Gondomar, un importante almacenamiento de más de 10.000 metros cúbicos de residuos de construcción y demolición mezclados, también, con el mismo asfalto que se había encontrado en las obras del cementerio, careciendo sus propietarios de la preceptiva autorización que los habilite para la gestión de residuos industriales.
El Seprona pudo constatar que hasta este almacenamiento habían llegado, al menos, 78 camiones que transportaban 468 metros cúbicos de asfalto que habían sido extraídos en las referidas obras de la red de abastecimiento de aguas.
Como consecuencia de las irregularidades penales detectadas en el marco de las diligencias instruidas, el Seprona procedió a la investigación de los dos administradores mancomunados de la empresa que gestiona el almacenamiento de residuos detectado en Gondomar, a los que se les acusa de un supuesto delito contra el medio ambiente y los recursos naturales.
Estas dos personas, que figuran con un amplio historial de denuncias por infracciones relacionadas con la normativa que regula la producción y gestión de los residuos de construcción y demolición, se les acusa también de otro delito de falsedad documental por expedir certificaciones como gestor de residuos, sin estar habilitados para ello.
Asimismo, también se procedió a la investigación del gerente de la empresa encargada de las obras de abastecimiento de aguas, como supuesto autor de otro delito contra el medio ambiente y los recursos naturales, en base a las irregularidades que se le detectaron en el plan de gestión de residuos, evidenciando que entregó los restos del asfalto generados en la obra como un simple residuo de construcción y demolición, desconociendo la composición del mismo, necesaria y preceptiva para la correcta gestión del residuo.
Las diligencias instruidas por el Seprona fueron entregadas en la Fiscalía de Medio Ambiente de Vigo.