Las investigaciones, según informó la Comandancia de Pontevedra en un comunicado, fueron realizadas por los efectivos del Puesto Principal de la Guardia Civil de Baiona-Nigrán en el marco de la denominada operación “KULLA” y culminaron a última hora del pasado viernes con la detención de estos cuatro individuos cuando regresaban al hotel en el que se encontraban hospedados, poco después de cometer un robo en una vivienda en O Porriño.
Fueron interceptados a las 22:45 horas en el interior del parking del hotel. Al inspeccionar el vehículo se encontraron joyas, varios teléfonos móviles y una importante cantidad de dinero en billetes fraccionados, que suman 4.525 euros.
La actividad delictiva de este grupo criminal organizado, también se evidencia con el vestuario y las herramientas que se encontraron escondidas dentro del coche. En el interior del vehículo se localizaron las herramientas que se utilizan habitualmente para cometer este tipo de delitos contra la propiedad, entre ellas: linternas, un destornillador, numerosos guantes distribuidos por todo el vehículo, una cizalla en el maletero y una pata de cabra oculta y disimulada debajo el asiento del copiloto.
Se les atribuye igualmente la comisión de otro robo perpetrado el jueves, día 28, en una vivienda de la parroquia de Nespereira, en el municipio de Pazos de Borbén, de donde supuestamente procede parte del dinero que se recuperó.
Se trata de cuatro ciudadanos de nacionalidad albanesa en edades comprendidas entre los 23 y los 25 años, sin domicilio conocido en España. Dos de ellos tienen sendos señalamientos policiales de prohibición de entrada en los países del territorio Schengen.
Según se pudo averiguar, estas personas llegaron al hotel de Nigrán el miércoles, día 27 y tenían pensado marcharse el sábado, día 30. El vehículo que están utilizando para sus desplazamientos, un Peugeot-407, de color azul, figura a nombre de un ciudadano de nacionalidad rumana, con domicilio en Barcelona, que está reclamado por un juzgado de Granollers.
El modus operandi de estos grupos itinerantes es similar en todos los casos. Suelen alojarse durante unos días en establecimientos hoteleros discretos, con el fin de pasar desapercibidos y eligen sus objetivos, que normalmente son viviendas, en otras localidades distintas. Acostumbran a actuar durante el día y aprovechan los momentos en los que no se encuentra nadie en la casa.
Para cometer los robos violentan las puertas o las ventanas con las herramientas que llevan en el coche. Una vez en el interior actúan con extraordinaria rapidez, apoderándose de todos los objetos de valor, fundamentalmente joyas y dinero en efectivo.
Los detenidos, junto con los efectos incautados y el vehículo intervenido, pasaran durante la mañana de hoy a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Vigo, acusados de la presunta comisión de dos delitos de robo con fuerza y pertenencia a un grupo criminal organizado.