Nigrán ha dado un paso histórico al lograr un acuerdo con la Diócesis de Vigo-Tui para la cesión gratuita del convento de los Franciscanos de Vilariño. Este emblemático edificio, con una larga historia ligada a la comunidad, será rehabilitado y convertido en un centro de encuentro y actividades para los vecinos.
Las negociaciones, iniciadas hace dos años, culminaron con la firma del convenio entre el alcalde, Juan González, y el Vicario Episcopal de Asuntos Económicos, Jesús Martínez Carracedo. El acuerdo establece una cesión por un periodo de diez años, prorrogable, y compromete al Concello a asumir el mantenimiento del edificio y a llevar a cabo las obras de reparación necesarias, especialmente las relacionadas con las humedades.
«Estamos muy satisfechos con este logro. El convento de Vilariño es un lugar muy querido por los vecinos y, tras años de estar sin uso, por fin podrá recuperar su esplendor y convertirse en un espacio vivo y útil para la comunidad», afirmó el alcalde.
Un espacio para todos
El objetivo principal es crear un centro sociocultural donde los vecinos puedan desarrollar diversas actividades, desde cursos y talleres hasta encuentros y eventos. Además, el Concello también organizará actividades municipales en el convento, facilitando así el acceso a los servicios públicos a los habitantes de Vilariño.
«Queremos que cada parroquia de Nigrán tenga un espacio propio para la comunidad. Con este nuevo centro en Vilariño, junto con los ya existentes en otras zonas del municipio, estamos dando respuesta a una demanda histórica de los vecinos», aseguró González.
Un poco de historia
El convento de los Franciscanos de Vilariño fue construido en el siglo XVII y perteneció a varias familias nobles antes de ser adquirido por la Orden Franciscana Portuguesa en 1905. Tras décadas de uso como centro de formación religiosa, el edificio pasó a manos de la Diócesis de Tui-Vigo en 1988.
Destaca la figura del padre Luis de Patrocinio, un fraile portugués muy querido por los vecinos, especialmente por las pescaderas de la Ramallosa, a quienes se le atribuía la capacidad de atraer la buena suerte.
Un futuro prometedor
Con este acuerdo, el Concello de Nigrán da un paso más en su compromiso con la revitalización del patrimonio histórico y cultural del municipio. La recuperación del convento de los Franciscanos de Vilariño es un ejemplo de cómo un edificio con una larga historia puede adaptarse a las necesidades de la sociedad actual y convertirse en un lugar de encuentro y convivencia para todos.