Galicia ya sabe cómo pasará sus días grandes de Navidad. El comité clínico para el seguimiento de la pandemia en la comunidad autónoma se ha desmarcado de las directrices del Ministerio de Sanidad y en lugar de limitar las reuniones a diez personas, las restringirá a dos unidades de convivencia “estables” independientemente de los individuos que las conformen. Así, sólo se contempla el concepto de “allegado” si forma parte de esa unidad de convivencia.
Por unidades de convivencia se entienden aquellas compuestas por personas que hagan vida diaria y pernocten en un mismo domicilio. El matiz de la estabilidad que ha introducido la Xunta se refiere a que una determinada unidad no debe celebrar una cena con otra unidad en Nochebuena, con otra diferente en Navidad, con otra en Nochevieja o con otra en Año Nuevo.
Además, la Consellería de Sanidade ha precisado que si es necesario romper ese máximo de dos unidades no se deben superar las seis personas presentes, sin contar los menores de 10 años. No obstante, el conselleiro, Julio García Comesaña, ha pedido que las comidas y cenas se ciñan a una sola unidad familiar para evitar contagios indeseados.
Por otro lado, no habrá libre movilidad interna entre concellos salvo causas de fuerza mayor o para visitar familiares. Regirán, por tanto, siempre las restricciones vigentes en cada momento en cada ayuntamiento. Comesaña ha recordado igualmente que está prohibido entrar y salir de Galicia entre el 23 de diciembre y el 6 de enero salvo causas de fuerza mayor o para visitar familiares. Del mismo modo, el toque de queda no empezará hasta las 01.30 horas en la madrugada de Nochebuena a Navidad y de Nochevieja a Año Nuevo.
Las medidas anunciadas este miércoles por la Consellería tendrán vigencia durante los días 24, 25, 31 de diciembre y 1 de enero. De cara a las comidas y cenas de esas jornadas, Sanidade ha recomendado que se organicen preferiblemente al aire libre o con las ventanas abiertas, en una mesa grande para ganar distancia, con la mascarilla puesta siempre que sea posible, que la mesa sea puesta por una sola persona, que no se produzcan saludos y abrazos, que se no compartan bebidas y alimentos, que haya un lavado de manos constante y que se mantengan “los mínimos contactos posibles” en vísperas a esos días grandes.
Comesaña ha recordado que esta será la única Navidad sin vacuna y que la sociedad gallega no puede “tirar por la borda el trabajo y el esfuerzo” de los últimos meses. “Tenemos que celebrar la Navidad de otra manera como llevamos viviendo de otra manera este año”, ha declarado.
Con todo, el conselleiro avisó de que estas decisiones se han adoptado en el actual contexto epidemiológico y, por tanto, las medidas podrían sufrir cambios si la situación varía. De hecho, la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, ha informado de que el escenario de la pandemia ha empeorado en los últimos días en el conjunto de Galicia, que ahora mismo presenta una “tendencia estable ascendente”. Asimismo, el comité clínico ha creado un subcomité específico sobre la vacuna de la Covid-19.