El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, envió este lunes un mensaje que parecía dirigido al Concello de Vigo. A la vez que aseguraba que el área sanitaria olívica es la que más preocupa actualmente por la evolución de la pandemia, pedía evitar las aglomeraciones. Todo apuntaba a una referencia velada a la celebración de la Navidad en la ciudad olívica, hasta tal punto que el alcalde, Abel Caballero, se ha dado por aludido. El regidor vigués ha dedicado gran parte de su rueda de prensa de este martes a defender el “exquisito” cumplimiento de la normativa ‘anticovid’.
“En Vigo se respetan las normas”, ha sostenido. El alcalde tampoco quiso referirse directamente a su rival político y, de hecho, lo evitó de todas las formas posibles a pesar de las reiteradas preguntas de los medios de comunicación. “Todo el mundo sabe a quién me refiero”, se limitó a decir Caballero después de criticar “a los que intentan desalentar la actividad económica”. “A alguno no le gusta que la actividad económica y el turismo vayan bien en Vigo”, añadió.
Al igual que en días pasados, el regidor olívico defendió el comportamiento “generalizado” en la vía pública, en las atracciones navideñas y en la hostelería. “Es visible que en la calle todo el mundo va con mascarilla”, insistió. “Y en la calle se guardan dos y más metros de distancia”, afirmó. A su juicio, las aglomeraciones contra las que hay que luchar son aquellas “que no cumplen las normas”. Ya este lunes había cargado contra botellones y reuniones de negacionistas.
En su tesón por proteger la Navidad de Vigo, Caballero negó que sea necesario un dispositivo policial mayor al que ya se está desplegando, que de por sí es superior al del resto del año en la ‘zona cero’. “Hay una movilización muy generalizada de la Policía Local y de Protección Civil ordenando el tránsito”, explicó. El alcalde volvió a poner el ejemplo del árbol gigante de Policarpo Sanz, donde caben 200 personas “al aire libre” y “metemos a 20 con mascarilla”.
Precisamente el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, llamó recientemente al alcalde para pedirle vigilancia por parte de los agentes del cuerpo municipal. “Seguiremos manteniendo la actividad de la Policía Local haciendo cumplir la norma”, ahondó Caballero. “Las normas se cumplen escrupulosamente y a quien no las cumple le sancionamos”, prosiguió. En todo caso, abrió la puerta a un mayor despliegue si así se lo pide la Xunta a través de la normativa vigente. “Haremos todo aquello que dicte la autoridad sanitaria”, lo cual ya se sigue “escrupulosamente” y “en su literalidad”.
La incidencia acumulada en 14 días en la ciudad de Vigo asciende a 652 casos nuevos por cada 100.000 habitantes, un dato muy superior al de hace un año (188). Los hospitales atienden a 108 personas con Covid-19, de las cuales 24 permanecen ingresadas en las UCI. Aunque la Xunta muestra una mayor preocupación por la situación del área sanitaria viguesa, la transmisión del coronavirus en la urbe olívica es menor que en las ciudades de Ourense y Pontevedra.