El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha apelado este lunes a la prudencia ante la posible retirada del uso de mascarilla en interiores y ha defendido que esta medida se realice siempre “con criterios técnicos” y de forma gradual.
Comesaña ha reconocido que la mascarilla, que fue “tan eficiente” en las diferentes fases de la pandemia para evitar transmisión, “tiene que desaparecer” en algún momento. Eso sí, ha dejado claro que la forma de abordar este debate “no es en una rueda de prensa ni en una entrevista”.
En este sentido, ha confiado en que el debate que se produzca en el próximo encuentro del Sistema Nacional de Salud y en el Consejo Interterritorial sobre su retirada “sea técnico y que las conclusiones y plazos sean fruto del debate y no de oportunidad”.
Todo ello, en un momento en que “todavía estamos vacunando a niños del grupo 5-11 años” y cuyo proceso está previsto que remate esta misma semana, ha añadido.
El conselleiro ha recordado que algunas comunidades como Galicia, “por precaución”, acordaron mantener la recomendación del uso de la mascarilla en los patios de los centros educativos por un principio de prudencia ante posibles “aglomeraciones”. “No podemos pasar de esa consideración a, de repente y sin mayor estudio técnico, quitar mascarillas en el interior”, ha opinado.
El conselleiro ha dejado claro que la Xunta “no huye” del debate de la retirada de la mascarilla sino que “creemos que tiene que ser técnico y tiene que ser gradual y, desde luego, según cómo vaya evolucionando” la situación.
Preguntado por una posible retirada gradual, en primer lugar, en los colegios, ha explicado que es “una línea de trabajo que no es descartable”, a medida que vaya evolucionando la vacunación y que se va a estudiar.
De hecho, ha recordado que Galicia tiene el “mayor porcentaje de vacunación” en niños de 5-11 años en la primera dosis, situación que previsiblemente se mantendrá en la segunda.
Con todo, ha insistido en que hay que ser “prudentes” a la hora de proceder a suprimir el uso de una medida que es “importante” y que, según el conselleiro, se ha demostrado, “que está funcionando muy bien en interiores” ante la evolución de contagios.