Septiembre termina para el área sanitaria de Vigo confirmándose como el peor mes de la pandemia desde que se doblegó la curva en primavera. El número de pacientes activos ha pasado a ser más del doble (de 237 a 503) en 30 días y el ritmo de contagios diarios remontó sensiblemente con respecto a agosto. Así, la media de positivos cada 24 horas ha subido de 11 a 26 casos por jornada.
De hecho, se llegaron a registrar picos de 46 enfermos nuevos de Covid-19 en un solo día, hasta sumar 781 al acabar el mes. Al menos el ritmo de curaciones, al haber también muchos infectados, ha sido elevado: 512 personas vencieron al coronavirus en septiembre.
Por el camino, por desgracia, se quedaron tres pacientes, todas ellas mujeres. Precisamente cuando se cumplían tres meses del último fallecimiento, el día 10, se registró la primera víctima mortal de la segunda ola. Aunque el área sanitaria de Vigo aguantó bastante sin sufrir nuevas defunciones, parecía cuestión de tiempo que volvieran los decesos a los hospitales de la ciudad. Esta pésima noticia se repetiría tres días después y una semana más tarde. En esta última ocasión era una mujer de 56 años la que perdía la vida. Se trataba de la tercera víctima mortal más joven desde el inicio de la pandemia en el área olívica.
Los centros sanitarios también han visto incrementada su carga asistencial. Si el 31 de agosto atendían a nueve pacientes con Covid-19 ahora tienen a 21 personas ingresadas. Las UCIs no escapan a este empeoramiento. El mes empezaba con un solo enfermo grave y concluye con tres.
En todo caso, los últimos días han dejado un hueco para la esperanza. A pesar del regreso a las aulas y de que se han vuelto a dar positivos en las residencias de ancianos, el ritmo de nuevos contagios ha descendido y eso ha permitido reducir la cifra de casos activos. Habrá que esperar, no obstante, para saber si se trata de una tendencia que se consolida o de algo circunstancial.
También dentro de lo malo, el área de Vigo puede seguir ‘presumiendo’ de no haber padecido brotes de gran entidad y no ha visto alterado el escenario existente por aumentos repentinos, como sí ha ocurrido en A Coruña, Lugo y Santiago –que ahora ya están reconduciendo su situación-, así como en Pontevedra y Ourense, que siguen preocupando. De hecho, Sanidade acaba de activar nuevas restricciones en la ciudad de As Burgas.