El Concello de Vigo ha dado al fin a conocer su plan de ayudas a la hostelería, muy demandando por el sector especialmente tras el cierre decretado la semana pasada. Abel Caballero ha anunciado este miércoles que los locales quedarán exentos, mientras dure la medida promovida por la Consellería de Sanidade, de pagar la tasa de recogida de residuos, la parte municipal del recibo del agua y la tasa de vados comerciales.
A este beneficio podrán acceder todos los negocios, independientemente de que estén ofreciendo servicio a domicilio o no. Al haberse abonado ya los recibos de este año, se optará por introducir los descuentos pertinentes “en el primer pago del año que viene”.
Aunque reconoció que todavía se está cerrando el cálculo, el alcalde ha cifrado en “casi un millón de euros” el impacto que estas bonificaciones tendrán en las arcas del Ayuntamiento vigués. De esta manera, según Caballero, la ciudad ayudaría a la hostelería por un importe similar a la Xunta de Galicia, que dedicaría 900.000 euros a los establecimientos vigueses a través de las ayudas directas anunciadas el pasado jueves.
A este respecto, el regidor olívico calificó de “tomadura de pelo” la cuantía destinada por el Ejecutivo autonómico, al que recordó que recibió 750 millones de euros del Gobierno de España para atender la caída de la economía en Galicia.
Además, Caballero repasó otras medidas para favorecer el buen funcionamiento de la hostelería como las implantadas en la primera ola de la pandemia, la habitual exención de la tasa de terrazas y el dinero invertido “para favorecer el turismo y la salida de la gente a la calle” con iniciativas como el alumbrado navideño o la promoción de otras fiestas locales.