Con más de 7.000 trabajadores en su plantilla, parecía cuestión de tiempo que PSA Vigo se viera afectada por la Covid-19. El coronavirus ha entrado en la fábrica de Balaídos pero no de forma directa, sino por el brote surgido en la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional. El contacto mantenido por una empleada de una subcontrata del grupo automovilístico con uno de los antidisturbios infectados ha provocado que esta persona también haya dado positivo y la factoría haya tenido que activar el correspondiente protocolo.
PSA Vigo ha confirmado que tuvo conocimiento del caso esta semana y, tras dar aviso a las autoridades sanitarias y efectuar los rastros pertinentes, se ha aislado a once trabajadores más, que permanecen confinados en sus domicilios a la espera de conocer los resultados de las pruebas a las que fueron sometidos.
De todos modos, este incidente no ha alterado el día a día de la planta viguesa, que ha reorganizado el trabajo correspondiente para proseguir con las rutinas laborales. Mientras, el brote de la comisaría, que inicialmente se ceñía a cinco efectivos policiales, se ha trasladado a las oficinas, donde dos agentes han dado positivo en las últimas horas. De esta manera, ya son siete las personas contagiadas y 27 las confinadas.
Según el último parte ofrecido por la Consellería de Sanidade, publicado este jueves, el área sanitaria de Vigo tiene 185 pacientes activos, cuatro de ellos ingresados en hospitales. En la última semana se han registrado exactamente 100 nuevos casos de Covid-19. Pese a ello, la ciudad olívica y los municipios de su entorno presentan una situación mucho más favorable que otras zonas de Galicia como A Coruña, Lugo, Ourense o Santiago.