¿Se debe dar prioridad a la vacunación de las personas más jóvenes ante la propagación del virus en este grupo de edad? Esa pregunta está siendo objeto de debate y se la plantea también la Consellería de Sanidade. Según reveló este miércoles la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, Galicia no descarta alterar el orden previsto con el objetivo de intentar acotar los contagios entre estudiantes. Lo sucedido en Mallorca y el aumento de la interacción social entre los jóvenes ha propiciado esta posibilidad.
Por un lado, se lograría frenar la propagación de la Covid-19 pero, por otro, se podría discriminar a otros colectivos como el de 30-39 años o incluso el de 20-29. Hay que tener en cuenta que los más afectados por el virus en la comunidad gallega, a diferencia de lo que sucede en el conjunto de España, son los menores de edad. Además, este agravio se daría después de que algunos de ellos se saltaran las normas sanitarias, lo cual generaría más polémica.
La doctora Durán declaró este miércoles que por ahora “se seguirá bajando de edad”. De hecho, tampoco hay mucho margen de maniobra teniendo en cuenta que ya se ha dado cita a mucha gente de entre 30 y 39 años. Principalmente, a nacidos en 1982 y 1983. Se empezará con ellos este fin de semana. No obstante, la directora xeral aclaró que “no se cierra ninguna puerta”, por lo que se podría dar prioridad al grupo que está aglutinando la mayoría de los contagios. “Hay estudios que hablan de que el riesgo en las personas que tienen entre 30 y 39 años sigue siendo superior al de los más jóvenes”, incidió, al mismo tiempo que avisó de que la situación epidemiológica “puede variar y hacernos cambiar de decisión”.
Una de las opciones que tendría la Consellería de Sanidade para vacunar a los estudiantes sería ese sistema mixto que se prevé instaurar “a principios de julio”. Mediante este mecanismo se combinará la cita directa por parte del Sergas con la petición propia de cada persona. No obstante, en este caso las autoridades sanitarias quedarían a expensas de la voluntad de cada joven.
A este respecto, desveló que la herramienta para “poder hacer una autocita” está “prácticamente terminada”. “Empezaremos haciendo pruebas con colectivo específicos y en los primeros días de julio estará plenamente operativa”, ratificó.
Cribados y restricciones
Así pues, entre las iniciativa más inmediatas se encuentra la reactivación de los cribados masivos. Durán informó de que se citará a 11.000 gallegos y gallegas en los próximos días para pasar una prueba PCR. El área sanitaria de Pontevedra, la más afectada por el ‘macrobrote’ de Mallorca, centrará buena parte de esos test. Sanidade ha pedido a todo el mundo que participe en esta estrategia de “detección precoz” porque supone una “herramienta” efectiva “para poder aislar” positivos.
La ciudad de Pontevedra entrará el sábado en nivel medio de restricciones, lo que frustrará la reapertura de su ocio nocturno. Recordemos que ese regreso solo se podrá producir en los municipios que se rijan por limitaciones de nivel bajo y el comité clínico decidió este martes endurecer las medidas en esta urbe. También hizo lo mismo en Cambre, Castroverde, Oia, Barro, Cambados, Poio, Vilaboa y Vilanova de Arousa. En ellos, los establecimientos de hostelería dispondrán de una ocupación máxima del 30% en interiores y del 50% en terrazas. Además, Sarria y Carnota pasan a nivel alto, por lo que adicionalmente estos locales permanecerán cerrados en el interior y tendrán un aforo del 50% en exteriores.