Francia ha adelantado el toque de queda en el país a las 18.00 horas y a algunas comunidades autónomas de España les gustaría emular la medida. En el caso de Galicia, el presidente de la Xunta no lo ha solicitado pero sí ha pedido al Gobierno de España que ofrezca esta posibilidad en caso de que sea necesario en un determinado momento. Además, Alberto Núñez Feijóo ha trasladado al Ministerio de Sanidad que se ofrezca la opción de imponer confinamientos domiciliarios por municipios o provincias.
Hay que recordar que el decreto del estado de alarma aprobado sitúa el toque de queda general a las 23.00 horas pero admite adelantarlo hasta las 22.00 horas o atrasarlo hasta medianoche. En este sentido, Galicia no considera “un disparate” situarlo en las 18.00 horas y ve “razonable” habilitar los mecanismos jurídicos que lo permitan. “Si algún presidente lo solicita, será porque tiene argumentos epidemiológicos para hacerlo”, ha declarado este viernes Feijóo.
Algo parecido sucede, en opinión del mandatario gallego, con los confinamientos domiciliarios. Él lo ha descartado en varias ocasiones porque entiende que “no es imprescindible”, pero prefiere que esta fórmula esté legalmente disponible si alguna autonomía desea implantar confinamientos “parciales, municipales o provinciales, en su caso”.
Feijóo ha puntualizado que esta medida, como norma general para la población española, es muy drástica y prefiere evitarla. “Son palabras mayores y debemos de intentar no hacerlo”, ha opinado a pesar de reconocer que la pandemia “se está expandiendo” por Galicia “con mucha más rapidez y progresión” que en las dos olas anteriores.