«No íbamos a decir nada pero al ver que decían que mi abuela estaba asintomática y que por eso se contagiaron los sanitarios no pude contenerme», explica a VIGOÉ el nieto de una de las dos personas ingresadas con Covid en el hospital Álvaro Cunqueiro. El joven escribió un comentario en la red social Facebook en el que ha criticado las informaciones publicadas al respecto y las diferentes negligencias que ha sufrido la familia en este caso concreto. Este jueves, el Sergas ha comunicado que 27 sanitarios (ocho enfermeras, 11 TCAE y ocho celadores) están en aislamiento tras haber estado en contacto en el hospital con una persona que dio positivo en Covid «asintomática», lo que la familia niega. El Sergas, por su parte, insiste en que se cumplieron todos los procedimientos.
«La mujer de 77 años que nombran es mi abuela», comienza el escrito del joven, de 25 años. Él reside en Gondomar y su abuela vive en un piso de Vigo. Él es quien tiene un contacto más estrecho con ella y por esa razón es el único del entorno de la mujer al que le han hecho el test PCR, con resultado negativo.
Su relato pone rostro a una mujer con nombre y familia que fue ingresada hace una semana tras romperse la cadera. «Lo único que es verdad es que fue ingresada por una rotura de cadera, pero no como asintomática», insiste el joven, que refiere que advirtieron a los sanitarios antes del traslado que había tenido unas décimas de fiebre, diarrea y dolor de cabeza. «Vinieron a buscarla a casa en ambulancia con los trajes y el protocolo Covid porque sabían de la existencia de los síntomas, hasta aquí todo bien», añade.
La sorpresa llegó, sin embargo, en el momento del ingreso en planta. «Ella tenía síntomas de Covid pero en el hospital decidieron ignorarlos. Es mentira que estuviese asintomática», recalca. No hubo PCR y, por lo tanto, tampoco se barajó su hospitalización en régimen de aislamiento. Así, una semana hasta que llegó la prueba, dentro de la rutina establecida por el Sergas como paso previo a la entrada en quirófano, no por los síntomas que había manifestado. «Han puesto en riesgo a más de cien personas», refiere al respecto de que su abuela ha estado ingresado durante una semana sin protección alguna. «Poniendo en riesgo de esta manera a enfermeros, médicos y celadores que cambiaron de turno cada ocho horas y a todos los familiares que hemos estado allí y al resto de enfermos de la planta», añade.
Tras siete días, fue trasladada a la planta destinada a los pacientes con Covid, asintomática. «Ella se encuentra bien y los médicos aseguran que con toda probabilidad el virus ya ha quedado atrás», explica.
El Sergas subraya que no hubo la más mínima sospecha
Por su parte, el Sergas remitió una nota ratificando la seguridad del protocolo y destacando el «buen criterio a la hora del manejo de los pacientes con sospecha de infección».»Desde la Dirección del Área Sanitaria de Vigo se quiere poner una vez más en valor el trabajo de los profesionales sanitarios de los servicios de Urgencias, tanto extrahospitalarios como hospitalarios, de las unidades de hospitalización y, en general, de todo el personal del área», subraya.
Así, subraya que todos los días se realizan entre 20 y 50 pruebas diarias de PCR tanto en Urgencias como en las unidades de hospitalización y que «si en algún momento hay una mínima sospecha se realiza la prueba».
En el caso concreto de la mujer que dio positivo tras una semana hospitalizada en planta, el Sergas subraya que ni en el informe remitido por el PAC ni en el de Urgencias se reflejó otro dolor que no fuese el propio de la cadera tras una caída accidental. El Sergas remitió el comunicado tras revisar la historia clínica de la paciente y solicitar información a los responsables médicos que siguen su caso. «Durante su hospitalización, fue diariamente valorada, no solo por el personal de Enfermería, sino también por la Unidad de Ortogeriatría y el servicio de Traumatología, destacando que en las notas y comentarios se detallaba expresamente la ausencia de signos o síntomas respiratorios», informa la nota remitida por el Sergas. Al respecto, precisa que además del dolor en la cadera, «el único signo registrado fue la presencia de síntomas de baja intensidad, sin dolor adicional, fiebre ni otros signos de alarma».
Por último, añade que la paciente no declaró ni mostró signos de síntomas en la vía respiratoria y que el PCR para Covid se le realizó como parte del protocolo preoperatorio del servicio de Traumatología.